Los niños estaban en una colonia, en Florencio Varela. Intentaron esconderse en un bosque. Uno de 11 años falleció en ese lugar y otro, de 8, en un hospital. En una quinta murió un joven de 25 años y en Luján, el masajista de Racing.
Dos niños y dos adultos murieron y al menos otros nueve chicos resultaron heridos por la caída de rayos durante la tormenta eléctrica que hubo ayer en el conurbano bonaerense, en Florencio Varela y Luján.
Al igual que los menores fallecidos, algunos de los heridos salían de la pileta y caminaban por el bosque de una colonia de vacaciones en Florencio Varela. Uno de ellos continuaba muy grave. Otra de las víctimas fatales era el masajista de Racing, Jorge César Nardi, de 61 años, que se desmayó sobre el campo de juego del complejo Open Door, donde entrenaba el plantel profesional. Por el mismo fenómeno también sufrió heridas leves el futbolista Brian Lluy, quien fue trasladado al Hospital de Luján. Según fuentes del hospital Mi Pueblo, de Varela, el tercer fallecido fue Orlando Mollo, un hombre de 25 años, de nacionalidad boliviana, que trabajaba en una quinta y llegó muerto.
Roberto Castronuovo, jefe de la región sur de la Policía Bonaerense, informó que, pasadas las cinco de la tarde, “un rayo cayó en la colonia Casa de Encuentros Cura Brochero y, rápidamente, los móviles de la comisaría 4ª acudieron al lugar y trasladaron a algunos chicos al hospital El Cruce y a otros al hospital Mi Pueblo”.
El doctor Juan Manuel Fragomeno, de El Cruce, confirmó que seis chicos fueron trasladados allí por la policía provincial: “Llegaron cerca de las seis de la tarde, con una electrocución. Uno de ellos, de 11 años, murió al llegar, producto del shock eléctrico. Pudimos reanimar a otros dos, que también tenían paro cardiorrespiratorio y quedaron en terapia intensiva.” Pero uno de ellos, de 8 años, murió horas más tarde. “Fue muy duro. Los otros tres permanecerán en observación”, dijo el médico, quien sostuvo que los menores “no tenían más de 12 años”. Leonardo Busso, jefe de terapia intensiva pediátrica de ese hospital, dijo en conferencia de prensa que también hubo adultos heridos y que el chico que quedó en estado crítico podría sufrir “secuelas por la reanimación”.
Desde el centro de salud Mi Pueblo, informaron que allí recibieron a otros cinco menores, que ya estaban fuera de peligro. Según las autoridades de ese hospital, “a los cinco nenes los trasladó un hombre, que se presentó como un vecino y que dejó el lugar una vez que llegaron las familias de los chicos”.
Uno de los menores fallecidos tenía un hermano que también asistía a la colonia y que quedó internado en el hospital Mi Pueblo, mientras sus padres eran contenidos por personal de El Cruce.
El Comisario Mayor Pablo Otero, de la jefatura departamental de Quilmes, aseguró que “no se podía prever semejante tormenta eléctrica”. La investigación del accidente quedó a cargo de la Fiscalía Descentralizada de Florencio Varela. El Padre Lucio Carvalho Rodrigues, de la Casa Cura Brochero, no quiso dar detalles pero acompañó a los heridos al hospital. 260 chicos asisten a esa colonia, situada en el barrio El Rocío, en el sur bonaerense. Además, es un “centro de espiritualidad”, dependiente de la diócesis de Quilmes. Allí se realizó, el año pasado, la última asamblea anual de Cáritas.
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