La Presidenta dijo que es una "deuda de la democracia" y aseguró que "la manipulación de la información le hace mucho mal a la Argentina".
"La manipulación de la información le hace mucho mal a la Argentina y a los ciudadanos que tiene derecho a informarse". Así, Cristina Kirchner planteó la introducción al anuncio sobre una nueva ley de radiodifusión. Furiosa y visiblemente irrtiada, la Presidenta cuestionó al inaugurar las sesiones ordinarias en el Congreso de la Nación al diario Clarín por publicar que los Estados Unidos -el GAFI- observaba la ley de blanqueo de capitales. "La propia embajada de los EEUU salió a desmentir esto", dijo y parafraseó el titular más destacado de la edición del domingo: "Ahora dicen que Estados Unidos promete revisar su critíca".La iniciativa oficial de enviar un proyecto de ley de servicios de comunicación audiovisual se pondrá a consideración de los legisladores en un año electoral y con la guerra gaucha como telón de fondo, lo que le dará un aditamento marcadamente político a la discusión.Cristina aseguró que tener calidad institucional "no significa que los opositores voten o piensen igual que el gobierno nacional, sino que respalden aquellas cosas que mejoran la situación". "Cuando lleguemos a eso alcanzaremos la verdadera calidad institucional", dijo Cristina, quien adelantó que el gobierno continuará adoptando medidas "proactivas" y enviará al Congreso todos aquellos instrumentos que "las épocas exigen", como la reforma de la Ley de Radiodifusión, que es "una vieja deuda de la democracia".Al término de la sesión, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Aníbal Fernández, retomó las críticas al matutino. Fernández enfatizó que "el GAFI no ha hecho absolutamente ninguna recomendación a la Argentina" y agregó que "el diario Clarín, sobre el tema, hizo un informe nuevo sobre la base de información vieja, por lo que es un informe viejo". El funacionario también indicó que "hay que luchar contra el narcoterrorismo y el lavado de activos" y, en otro orden, dijo que la Ley de Radiodifusión es "muy importante como para que la presidenta la incluyera hoy en su discurso". El combate con ese multimedio alcanzó su pico el año pasado, cuando Néstor Kirchner levantó un cartel condenatorio y alentó la proliferación de estandartes con la consigna “Clarín miente”. El punto culminante fue cuando la mandataria interpretó como “mensajes cuasimafiosos” las ilustraciones que Hermenegildo Sábat realiza en el periódico desde hace décadas con los poderosos como tema recurrente.A pesar del armisticio que los Kirchner firmaron con Clarín tras la derogación de la resolución 125, el matrimonio presidencial parece dispuesto volver a la carga.
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