PARA APRENDER A ESCUCHAR NADA MEJOR QUE DESIDERATA

*Eduardo Cao
www.elretratodehoy.com.ar


Para aprender a escuchar nada mejor que Desiderata
La autoría del poema “Desiderata” está en discusión. Si fue Ehrmann circa de 1900 o algún fraile desconocido de St.Paul, alrededor de 1600. Lo único comprobable es que el hombre, antes y después, seguimos buscando la felicidad, que de eso se trata la obra y la concreción de nuestras “cosas deseadas”. A la solicitud de los argentinos para ingresar en ese estado espiritual, aún le faltan algunos datos. Es que, quizá, nos interese más participar de la “Búsqueda del Tesoro”.
“Habla de tu verdad tranquilo y claramente,/y escucha a los demás,/aun al torpe y al ignorante/porque ellos también tienen su historia./Evita a las personas agresivas y escandalosas/ellas son una molestia para el espíritu” ( Fragmento del poema Desiderata, del estadounidense Max Ehrmann -1872 /1945) publicado en 1948)Desiderata proviene del latín (es el plural de desideratum) y significa “cosas deseadas” y habla de la búsqueda de felicidad. Como no podía ser de otra manera en un mundo habitado por el imperfecto ser humano, a través del tiempo ha provocado controversias sobre su origen. No ya discusiones respecto de su fin –queda dicho, la felicidad- sino de su autor. Si bien hoy por hoy pocos dudan en adjudicarlo a Ehrmann, que lo registró en 1927, su publicación en 1948, luego de su muerte, sembró dudas sobre la autoría. Allá por los 60 se llegó a asegurar que el escrito de creador desconocido, databa de la fundación de la iglesia St. Paul en Baltimore, Maryland, en 1692 y que fue hallado hace 70 años durante obras de reparación del templo. De cualquier manera, la esposa de Ehrmann había recopilado en aquel año 48 los poemas adjudicados a su marido en la colección “Desiderata off happiness”. Si don Max era un fiel asistente a las misas de St. Paul, lo que podría dar un indicio de acercamiento al supuesto documento del siglo XVII, sigue siendo un misterio y como tal, no revelado.“ESCUCHA A LOS DEMÁS”“...y piensa en la paz que se puede encontrar en el silencio”, canta el “Puma” José Luis Rodríguez en la versión musical de Desiderata. A esto de prestar atención y no interferir cuando alguien nos está hablando, estamos poco acostumbrados los argentinos. Más bien, una de las características de la cultura social del citadino en este rincón de la Tierra, es el egocentrismo, el individualismo. El mismo que se potencia en actitudes cotidianas, en las palabras que se imponen por sobre las de los demás y en creer, de manera pertinaz, que el planeta gira alrededor nuestro, que empieza con nosotros y también termina con nosotros. He escuchado y leído en la última semana, cientos, miles de palabras que niegan la realidad, y no sólo de nuestros representantes –de los que nos ocuparemos- sino de gente común, habitantes como nosotros de este contradictorio país. Un ejemplo fue la encuesta publicada la semana pasada entre automovilistas. “Yo manejo bien, el resto es el que maneja mal” resultó, resumida, la repuesta del 99 por ciento de los conductores.Quizá duela, pero así somos y los políticos que entronizamos, en la búsqueda de concretar las “cosas deseadas”, constituyen una muestra cabal de esa postura ante la vida. Y también explica las razones de nuestro paso de la euforia a la decepción, sin solución de continuidad. El escritor costarricense Miguel Ángel Retana Zamora escribió que “mejor es la esperanza; pues produce paciencia, arma fuerte contra la decepción temprana”. Es cierto que los argentinos vivimos con la esperanza (después de todo es la razón de la existencia humana), pero también que la paciencia no es una de nuestras virtudes y que la decepción es el estado previo a la depresión, más evidente cuando se trata de los residentes en la megalópolis y sus satélites. LA DECEPCION ¿DESEADA?Prometí ocuparme de los políticos, nuestros representantes, y cumplo con “Desiderata” a la vista. Después de todo, sigo buscando la felicidad.El fracaso de la sesión en el Senado para dirimir la situación de Mercedes Marcó del Pont al frente del Banco Central fue una demostración de que muy pocos son los que “hablan su verdad tranquilo y claramente y escucha a los demás…” como pregonaba Max Ehrmann.La oposición citó a la funcionaria, la escuchó, no le preguntó y la despidió. En verdad, quería despedirla, no tanto del recinto en el que intentaba explicar los motivos de su obediencia debida al Gobierno en el traspaso de fondos ordenado mediante de un apenas nacido decreto de necesidad y urgencia, sino de su cargo en el BCRA. La decisión estaba tomada: por más que Marcó del Pont dijera lo que dijera, el antikirchnerismo la desplazaría. Contaba con su ajustada mayoría numérica y con la presunción de debilidades en el oficialismo. Así le fue… Ahora, tres legisladoras diferenciadas de los K, la santafesina Roxana Latorre, la rionegrina María José Bongiorno y la correntina Josefina Meabe, anticiparon que no votarán la remoción. Se les sumará Carlos Menem.Se habla y denuncia, demasiado y hasta el hartazgo, de intercambio de “favores”, de “operaciones” para modificar conductas, y de una supuesta “decepción” social generalizada. Es la bandera mediática, con sus particulares intereses, y discursiva, también con fines que apuntan a 2011. Hay excepciones y existen también los moderados, aquellos que reclaman acuerdos básicos. Son los menos ya que, para nuestra desgracia, los tiempos electorales tiñen con el color de la ambición. Sin embargo, la sociedad –es una percepción personal- sufre otras “decepciones” y la de la ratificación o no en el cargo de un funcionario si bien ocupa un lugar, no es éste el de sus prioridades o “cosas deseadas”, entre ellas que los poderes delegados cumplan con la Constitución y las leyes que son, ni más ni menos, las que darán dignidad a los ciudadanos. Claro que esos mismos ciudadanos deberían ser, y convencerse de que lo son, los primeros controles de ese orden de respeto mutuo de obediencia a las pautas de convivencia. E incumplen esa labor por aquello de que hablan más de lo que escuchan. Vale tanto para los oídos sordos de arriba como para los de abajo.CLIMA BICENTENARIOEn estos análisis estamos cuando volvemos a ojear la información, por aquello de la actualización. Así nos enteramos que unas 5.000 personas concurrieron a la convocatoria de un programa televisivo hiperoficialista (de Canal 7, el gubernamental siempre, estatal nunca) para apoyar al Gobierno K. Fue en Plaza de Mayo y la consigna era el insulto a Cobos, Carrió, y en menor medida a Macri y a Pino Solanas. ¿Se olvidaron de los otros peronistas que discuten y enfrentan el liderazgo K? Si fue así, al menos aparece como curioso que no se haya elegido como blanco de improperios a los compañeros adversarios, rivales como para temer en legisladas internas. Surge otra pregunta: ¿habrá internas? Desde hace muchos meses, incluso en esta misma columna, se habla de que si los las encuestas les siguen siendo adversas a los K, don Néstor estaría preparando el terreno para anular las internas abiertas y simultáneas previstas por ley para mediados de 2011, y convertir a las de octubre de ese mismo año en una puja partidaria en la cual algunos neutralicen a otros en la dispersión de votos, y conseguir achicar las cifras necesarias para mantener la conducción. De esta manera, aparecería como un interlocutor atento a las críticas que partieron de ciertos nucleamientos de la izquierda afín y, ¿por qué no?, de algún sector de la derecha inofensivo en lo electoral, ambos en peligro de extinción debido a su escaso caudal de adherentes y votantes.El que aparece como contrincante principal, Eduardo Duhalde, reaccionó ante la probable maniobra y advirtió que en estos tiempos “es imposible modificar el Código Electoral”, pues se requeriría que los cambios sean aprobados por la mitad más uno de los legisladores en cada una de las Cámaras del Congreso. El ex presidente utilizó la palabra imposible que no aparece en el diccionario K. De cualquier modo no habría que resignar la esperanza de que alguna vez se cumpla con los preceptos institucionales, aún en el país del “no lo hice, ni lo volveré a hacer”.Así como en el peronismo de los dos bandos, la posiciones en el radicalismo y su por ahora aliada Coalición Cívica parecen irreductibles. Sumergidos como están los dirigentes en la pelea personal, que intentan disfrazar de combates ideológicos, se vislumbra una más inmediata que mediata fractura. Los radicales intentan mostrar unidad de criterio al deslizar los nombres de Julio Cobos, Ricardo Alfonsín y el senador Ernesto Sanz como “presidenciables”, al mismo tiempo “ganan” una implacable enemiga interna, Elisa Carrió, a la que los moderados del partido de Alem y parte de los justicialistas disidentes ya le escapan para que no se piense que conduce a la oposición, como lo apuntó en off más de un legislador de ambos sectores.Al insistir en la derogación del uso de reservas para pagar la deuda, Carrió advirtió: “Si perdemos (en el rechazo que buscará el rechazo en Diputados), que la sociedad sepa a quién votó”. Y fue más allá al señalar que “en la oposición hay muchos que tienen miedo de gobernar. Hay partidos que son funcionales a la amenaza del PJ, el mejor ejemplo es el avance del Senado que fue correcto hasta que ellos mismos se asustaron del avance". Blanco o negro para Lilita. El tiempo le dirá si su rechazo a los grises es el camino correcto. Si de interpretar el voto mayoritario del 28 de junio de 2009 se trata, es cierto que fue un límite a un sistema absolutista, pero también que se repudió la prepotencia como método de imponer ideas, así como se impuso la necesidad del diálogo para desterrar excesos. Y eso le cabe a todos, en absoluto a todos, los poderes del Estado.FINAL PARA REFLEXIONARHace algunos días el diputado por “Salta somos todos”, Alfredo Olmedo, estuvo en Mar del Plata difundiendo su proyecto de reinstalación del servicio militar “no armado” como una forma de solucionar problemas que afectan a la juventud argentina.Los detalles se publicaron días atrás en “El Retrato de Hoy”. Las repercusiones, sorprendentes repercusiones, son las que llaman la atención: la mayoría de los encuestados expresó su acuerdo con volver a la “conscripción”, no la antaño, sino la de seis meses con hincapié en la educación. Sólo uno de los encuestados, rechazó la posibilidad.Frase 1: “Ya está tomada la actitud y no queda más que hacer “pata ancha”. Pero la ausencia del público corrige luego las resoluciones tomadas arbitrariamente, de suerte que cuando quedé solo, púseme, a pesar mío, a consultar las posibilidades de sostener mi gallardía” (Fragmento de Don Segundo Sombra, de Ricardo Guiraldes)Frase 2: “...la cultura da al hombre la capacidad de reflexionar sobre sí mismo. Es ella la que hace de nosotros seres específicamente humanos, racionales, críticos y éticamente comprometidos. A través de ella discernimos los valores y efectuamos opciones. A través de ella el hombre se expresa, toma conciencia de sí mismo, se reconoce como un proyecto inacabado, pone en cuestión sus propias realizaciones, busca incansablemente nuevas significaciones, y crea obras que lo trascienden”. (UNESCO, 1982: Declaración de México)

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