Los guardavidas lograron el aumento salarial y el reconocimiento de un mes más de trabajo con los empresarios de los balnearios de Mar del Plata. El compromiso se firmó en horas de la tarde en el marco de una audiencia convocada por el Ministerio de Trabajo, con la presencia de su titular provincial, Oscar Cuartango.
Las partes confirmaron el acuerdo al que habían arribado la semana pasada de un incremento salarial del 22 por ciento para los meses de noviembre y diciembre de 2010 y otro incremento del 8 por ciento a partir del sueldo de enero respecto al básico vigente a marzo de 2010 para completar el 30 por ciento y así tener salarios equiparados con sus colegas que prestan servicios contratados por la municipalidad.
Asimismo en la reunión se reconoció la vigencia de la ordenanza municipal que contempla la extensión del plazo mínimo de prestación del servicio de seguridad en playas de 150 días.
Eso sí, para facilitar el acuerdo general, el secretario de Gobierno de la comuna, Ariel Ciano, se comprometió con los concesionarios de los balnearios a mantener la cantidad de días de servicio y de guardavidas en las playas o de asumir los costos en caso de tener que incrementar cualquiera de los dos ítems.
Al finalizar la reunión, Cuartango sostuvo que "se logró un acuerdo que es satisfactorio para las dos partes y esto es el ideal en el marco de la actuación de nuestro ministerio: lograr que se establezca el consenso necesario para que establezca la paz social y que los turistas puedan disfrutas de las playas".
Consideró que "cada uno defiende sus intereses, pero cuando se flexibiliza lo necesario siempre se llega a buen puerto y hoy la Provincia aportó una importante gestión de conciliación y por suerte empresarios y trabajadores podrán seguir adelante con sus tareas".
En la audiencia, que se celebró en la sede de la Delegación Mar del Plata de la cartera laboral estuvieron presentes el secretario general de Guardavidas y Afines, Néstor Nardone; el secretario adjunto, Fernando Soto; y el secretario gremial, Ramón Ruiz. También el secretario general de la UGA, Miguel Nieto, y el secretario de capacitación, Pablo Cacharosky.
Por la parte empresaria, asistieron el presidente de la Cámara de Balnearios Cebra, Matías Machinandiarena; el vicepresidente de la entidad, Esteban Ramos; el tesorero, Jorge Mira Sabatelli, y el secretario Horacio Diana.
También participaron el secretario general adjunto de UTA, Pedro Fernández; el secretario gremial de CGT regional, Fabián Giovanello; el secretario general adjunto del Sindicato de la Carne, Osvaldo Quiroga; y el secretario general de Sindicato de Empleados Conductores de Remises y Afines, Daniel Merlo.
Si bien el ministro Cuartango lo negó categóricamente, los referentes sindicales reconocieron que el incremento salarial se había logrado, en parte, gracias a que la Provincia de Buenos Aires había accedido a hacerse cargo del pago de los 15 días trabajados en noviembre y los 15 días que trabajarán en abril los guardavidas que se desempeñan en el complejo de Punta Mogotes y de los 15 días de noviembre a los que trabajan en los balnearios del Sur.
Así lo confirmó en diálogo con la prensa Nardone, quien explicó que el acuerdo "es diferente según el caso" y aclaró que los empresarios concesionarios de la unidades turísticas fiscales se harían cargo del compromiso salarial sin ayuda del Estado provincial.
"Fue muy complicada -la negociación- pero por suerte pudimos llegar, con un poco de buena voluntad de todas las partes, a la resolución de este conflicto que en definitiva se termina resolviendo con lo que debería haber sido desde un principio: con los 15 días retroactivos de noviembre y el reconocimiento del aumento que habíamos pactado con la Municipalidad por parte del empresariado" reconoció el titular de UGA, Miguel Nieto, al término de la audiencia.
Nieto entendió que "no es fácil reconocer esto para los empresarios, pero después de este conflicto y por la presión pudimos llegar a buen término". De todas formas entendió que "creemos que ésta no es la forma de hacer las cosas, en un futuro tendríamos que tratar entre todas las partes de juntarnos antes y ponernos de acuerdo con más tiempo y tratar el tema de la seguridad en las playas como un tema importante de la ciudad y que se tiene que hablar antes para no tener problemas en la temporada".
Para finalizar reflexionó que "lo que quedó en limpio de este conflicto es que en el futuro tenemos que tener un diálogo más fluido tanto con la parte empresarial como con la municipalidad".
"Esto se hizo posible por el aporte del ministro -Oscar Cuartango-" aseveró el delegado del Ministerio de Trabajo, José San Martín, quien manifestó su agradecimiento a las partes por haber hecho concesiones para llegar al acuerdo que puso punto final al conflicto.
En la calle, un grupo de trabajadores vivaba al delegado, quien bajó a saludar y fue llevado en andas, en agradecimiento por sus gestiones.
Negociación final
Las tensas negociaciones duraron más de 3 horas, con la mediación del propio ministro Cuartango. Mientras los delegados sindicales intercedían por sus reivindicaciones, los trabajadores manifestaban cortando la avenida en la esquina de Luro y España. Esa reunión terminó con una "tregua" en la que los empresarios se comprometieron a pagar una suma de 2.000 pesos por trabajador y a otorgar un incremento del 22% a partir del salario de diciembre. Pero quedó por definir el resto del pago por los 15 días ya trabajados en noviembre, los 15 días que deberán trabajar en abril y otro 8% de aumento, para que se equiparen los salarios de los trabajadores del sector privado, con el de los municipales que habían acordado un incremento de más del 30% en sus negociaciones. "Igual tarea igual remuneración" señalaban los guardavidas, tanto puertas adentro como en la calle.
Los empresarios, en tanto, aducían la imposibilidad económica de mejorar los salarios más del 22% y de pagar más días por el servicio, teniendo en cuenta que los concesionarios incrementaron en promedio entre el 20 y el 22% el valor de las unidades de sombra en agosto. En cuanto a la extensión del servicio, fundamentaron que no les corresponde pagar salarios en épocas en que los balnearios están cerrados.
Durante la semana las partes habían avanzado en las negociaciones, tanto que incluso se adelantó un día la audiencia en el ministerio, originalmente pautada para hoy.
El corte del 2 de enero
El conflicto había estallado el 2 de enero cuando un grupo de guardavidas que cumplen funciones en la zona sur de la ciudad, -especialmente en Punta Mogotes- contratados por balnearios concesionados, cortaron el acceso a los estacionamientos del complejo reclamando cobrar igual sueldo que sus colegas municipales y los 15 días trabajados en noviembre.
Es que algunos de los trabajadores del sector no habían cobrado esos 15 días extra que trabajaron tal como se había dispuesto por ordenanza municipal. Tampoco habían percibido el aumento salarial que si habían logrado sus colegas que prestan servicio en las playas públicas.
Aquel corte generó momentos de tensión y confusión entre los trabajadores y los turistas y terminó con la convocatoria a una audiencia de conciliación para el lunes 3 en la delegación de Trabajo de la provincia, que encabeza José San Martín.
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