Escribe Roberto Molina
para el Retrato de Hoy
Finalmente, la dura y prolongada lucha por el Frigorífico Sadowa, fue ganada por la Cooperativa Recuperar, integrada por los trabajadores de ese establecimiento, que dejó de funcionar hace algo más de un año. Lo que quedó bien claro es que este conflicto dejó en abierta evidencia al Sindicato de la Carne, que con su postura demostró que no defiende a los trabajadores, sino a las empresas o a sus intereses particulares.La Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires aprobó y convirtió en ley el proyecto de expropiación, al que el gobernador Daniel Scioli dio su visto bueno previamente. Risas, lágrimas y abrazos en las escalinatas de la Cámara Baja provincial sellaron la lucha de un grupo de trabajadores para recuperar su fuente de trabajo en el histórico Frigorífico Sadowa. Según la ley, la cooperativa Recuperar, integrada por trabajadores, será la beneficiaria directa de la expropiación que cargará sobre sus espaldas el Tesoro provincial.
El gobernador Daniel Scioli se comprometió a promulgar la ley y a apoyar el funcionamiento de la cooperativa, con lo cual esto pone punto final a una etapa de profundas divergencias que dividió posturas entre los propios trabajadores y el gremio de la Carne, entre la población y hasta en el oficialismo bonaerense.
Las suspicacias sobre un millonario negocio inmobiliario produjeron cambios en el proyecto original, de manera que -- según la nueva ley -- la cooperativa recibirá tan sólo 10 hectáreas con las instalaciones y maquinarias, mientras que todo el resto del terreno, unas 40 hectáreas, pasará a manos del gobierno provincial, para ser destinados al Plan de Vivienda Social y Obras de Planeamiento Urbano que oportunamente determinará la administración bonaerense.
La expropiación y declaración de utilidad pública a favor de la Cooperativa de Trabajo Frigorífico Recuperar Limitada fue sancionada un día después de que los dirigentes del Sindicato de la Carne encabezaran un reclamo en la Autovía 2 para frenar este proceso legislativo. Buscaban ganar tiempo para que Siper SA pueda finalizar la transacción con el juzgado Civil y Comercial N° 6, a cargo de Alberto Vidal.
En el sindicato rechazan que una cooperativa se haga cargo del frigorífico porque consideran que los costos de funcionamiento son muy altos y porque los trabajadores merecen el empleo en blanco, con vacaciones pagas, cobertura social y gremial, ART, entre otros beneficios que no obtendrían con la cooperativa. Pero fueron los propios trabajadores quienes lucharon para obtener esta ley…
Carlos Vega, presidente de Recuperar, reconoció los altos costos necesarios para que el frigorífico se ponga en funcionamiento, pero retrucó las criticas sobre los derechos laborales. “A nosotros – dijo el dirigente cooperativista -- nos deben los aguinaldos desde el 2008, las vacaciones y las indemnizaciones. El Sindicato de la Carne salió a cortar la ruta a favor de una empresa, no para que nos paguen todo eso que nos deben”. Evidentemente, el Sindicato de la Carne de Mar del Plata estaba defendiendo otra cosa, menos a los trabajadores.
Ahora, con la ley en la mano, en los próximos días los miembros de la cooperativa tienen pautado distintas reuniones para poner en marcha cuanto antes la producción. Y no es cierto que porque los trabajadores están nucleados en una cooperativa, carezcan de los beneficios sociales y demás conquistas que el resto de los asalariados. A través de la cooperativa podrán obtener más y mejores beneficios sociales y su remuneración – cuando el frigorífico esté en marcha -- seguramente será superior a la del sector.
(*) Roberto Molina es director y editor de la Revista PRENSA COOPERATIVA
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