Por Eduardo Cao
para El Retrato de Hoy
Siempre me apasionó tratar de descifrar la conducta humana en la relación con sus pares y, particularmente, en la vinculación comunitaria. Confieso que estudiar sociología fue, y será irremediablemente, una de las tantas cuestiones pendientes en mi vida. Me conformé, y estoy agradecido pero no satisfecho (tampoco frustrado), con los palotes de esa ciencia: el periodismo.
Siguen aclaraciones necesarias por el uso de la palabra “palotes”. La primera, si bien aparece como pasada de moda, figura en todos los diccionarios de Internet, lo cual me tranquiliza bastante ante la posibilidad de que se inserten mis columnas en el género de “escrituras barrocas”. Es más, figura sin calificaciones etáreas –“cada uno de los trazos que hacen los niños en papel pautado, como primera ejercicio de escritura”-, en el más moderno sistema de comunicación social que hasta aquí se conoce.
Por otra parte, y esta es la segunda NdR, si la instrucción del siglo XXI dejó de lado los palotes como a “Upa”, su manual mentor, lo anterior me asegura que, como en la naturaleza, nada cambia aunque todo puede transformarse también en el lenguaje de la comunicación.
DE INTERÉS, ¿PARA QUIÉN?
Intuía que llegaría el momento de replantear el rol a desempeñar por el periodismo en una sociedad que, como la argentina, vive, acciona y reacciona con mayor o menor intensidad según su coyuntura personal.
Esto nada tiene que ver con la verdad revelada, sino, simplemente, con una cuestión de principios básicos: libertad individual, honestidad intelectual, sentido común, espíritu crítico y, sobre todo, dignidad personal.
En esta etapa de replanteos estamos desde hace tiempo, no ya desde 2003, sino de antes, mucho antes.
Sin que resulte irónico y ni siquiera a modo de indicador del camino a recorrer, sino apenas demostrativa de una actitud personal ante los vientos de cambio, hoy dedico este artículo a algunos temas que no le interesan a la gente.
- Caso Schoklender- Madres de Plaza de Mayo. El ex apoderado de la Fundación que preside Hebe de Bonafini, denunció judicial y mediáticamente a su ex mentora y defensora por, dijo y escribió en escueta presentación al juez Norberto Oyarbide, haber desviado fondos destinados a la construcción de viviendas, a las campañas electorales de Cristina Fernández de Kirchner, Amado Boudou y siguen los candidatos oficialistas. Están en danza 750 millones de pesos, algo así como 174 millones de dólares. También hay, dando vueltas por la cabeza de Schoklender, una sospechosa cuenta bancaria en España a nombre de Madres de Plaza de Mayo ¿Despecho por sentir que le “soltaron la mano” quienes deberían habérsela tendido?
- Caso Jaime. Al ex secretario de Transporte de la Nación lo están dejando “en paños menores” si de su abultado patrimonio personal se trata. La Justicia sigue inhibiendo sus bienes y la causa sigue, sigue, sigue…
- Caso Candela – Después de la inexplicable metida de pata de algún referente social con acceso a la Rosada transformada en audiencia concedida por la Presidente a la madre de la infortunada e inocente víctima, el trágico suceso fue convertido en duda “hamletiana”: ¿inseguridad o ajuste de cuentas? El interrogante, mal que pese a muchos, desembarca en el Estado, de la jurisdicción que sea, por métodos y políticas. No es que lo inventemos, sino de lo que plantearon los propios gobiernos, Nacional y bonaerense. Nosotros seguimos conmocionados, por Candela, por los dos muertos marplatenses en asaltos perpetrados en estos días y por todos los crímenes impunes cometidos por la delincuencia.
La lista es interminable y los aciertos y errores también.
Aciertos que, justo es reconocerlo, parten de un poder que ha llevado al pináculo su imagen de imbatible y fija la agenda nacional sin preocuparse por la recepción que puedan tener sus anuncios en la tropa de desplazados de su propio entorno. Léase Hugo Moyano e, incluso, Hebe de Bonafini. Después de todo, a la hora de sumar votos y aplausos, es más productivo aumentar un módico 20% el salario familiar para los trabajadores en blanco que inquietarse por la pirotecnica verbal del cada vez menos escuchado jefe cegetista o por los peros que intente interponer una oposición que, sin reponerse de la paliza de las primarias, ahora muestra profundas fisuras internas en la ruta hacia octubre.
¿Qué puede ocurrir en este lapso de 43 días? Ah, señoras y señores, esa es una cuestión de los sociólogos. Ellos miden, día a día, el humor social. Y saben explicarlo desde el punto de vista científico. En lo que a mi respecta, sigo con los palotes.
FINAL CON RECUERDO
"Aquí reposan los restos de una criatura que fue bella sin vanidad, fuerte sin insolencia, valiente sin ferocidad y tuvo todas las virtudes del hombre y ninguno de sus defectos." (Lord Byron, 1788/1824)
A Baxter, el fiel amigo y compañero que ya no necesita ladrar mirando las estrellas: ahora es una de ellas
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