El mismo 24 de marzo, un sin número indeterminado de personas, de distintas extracciones políticas fueron detenidas y enviadas en varios omnibus al cuartel militar de Camet. Muchas eran de la ciudad y otras de Miramar y Necochea. Entre ellos los diarios daban cuenta, de los siguientes nombres: Carlos Rohner(SOIP), Osvaldo Demattei (Sindicato de Municipales), Antonio Daguzán (Sindicato de Teléfonos), Norberto Centeno (laboralista), Roberto Comaschi y José Landin (CGT), Hector Intrieri(CdO), Alejandro Escobedo (JSP), el padre del Dr, Norberto Candeloro y un dirigente gremial, llamado Carlos Alberto Calleja. La noticia era del 27 de marzo, y en la misma, también se comenta, que no tenia noticias del dirigente gramial Amílcar González, "detenido" en la sede del Ministerio de Trabajo, por un grupo de personas que se movilizaban en un Fiat 125, celeste, un Fiat 1500 familiar azul y un Ford Falcon, color crema.
En la misma edición, mediante un Comunicado Oficial, informaba que "...las personas que han sido detenidas y puestas a disposición de esta Jefatura Militar, se encuentran en averiguación de antecedentes y aquellas en que no se comprobaren delitos económicos y/o comunes, serán puestas en libertad". Y por último se remarcaba, ante "infundadas" versiones, sobre personal de civil, que invocando el nombre de las Fuerzas Armadas realizaba "el secuestro de personas...esta Jefatura Militar, aclara en forma expresa y terminante, que el personal a sus ordenes, ejecuta sus actividades de patrullaje y detenciones, como correponde, identificadas con el uniforma que las identifica y prestigia..."
Quien pudo comprobar todo lo contrario, fue Oscar Amílcar González, en uno de los testimonios más estremecedores prestados ante el TOF, quien brindó escalofriantes detalles acerca de su cautiverio. Periodista del Diario "La Capital", Secretario General del Sindicato de Prensa local y de Exterior de la Federación Argentina de Prensa (FATPREN), también era corresponsal de varios medios nacionales como el diario "La Opinión" y repreentante de la agencia de noticias "Telam" en Mar del Plata..." Que en la tarde del 25 de marzo de 1976 se encontraban en el Ministerio de Trabajo junto con Amílcar González y otra gente del sindicato y cayó una patota para secuestrar a González. Que apareció un muchacho joven de 1,75 metros, de civil, con un fusil FAL en la mano y dijo: "¿ quien es Vairo? y una persona de atrás luego se dió cuenta que era la que dirigía el procedimiento dijo, "el de Télam", entonces González contestó "soy yo" (De la declaración de José Luis Ponsico, testigo presencial del secuestro).
El grupo estaba integrado por varios miembros de la CNU, entre los cuales posteriormente identificó al "Tano" Nicolla, quien resultó ser Nicolás Cafarello y a Fernando Delgado, como partes de un comando, que se identificó como "del Ejercito Argentino".
Fueron un poco más de 24 horas de ininterrumpida tortura. Llevado primero a un campo, en la zona de la ruta 88, camino a la localidad de Batán-que presume propiedad de la familia Bordeu- comenzó su primer calvario, teniendo la certeza de haber sido torturado por cuatro o cinco grupos diferentes, aunque siempre se le dijo, que estaba a disposición del Coronel Barda. En los interrogatorios se lo responsabilizó de la muerte de Piantoni, de contrabando de armas, de pertenecer a la organización "Montoneros" y de ser el ideólogo del asesinato de Coronel Reyes.-
Luego de horas de intensas interpelaciones, se lo trasnfirió a integrantes de la Policia de la Provincia de Buenos Aires. Su nuevo destino fue el destacamento de la calle Tucumán al 2800, donde funcionaba el Cuerpo de Infanteria de esa fuerza. Tras ser torturado en esa dependencia policial, es "depositado" en deplorables condiciones fisicas, en la Comisaria Cuarta. Era el amanecer del día 26 de marzo de 1976.
El 28 de ese mismo mes, los entonces directivos del Diario "La Capital" lo despiden, previa intimación a presentarse a prestar servicios, bajo pena de considerar su conducta como abandono de trabajo.En esos mismos dias también un grupo armado ingresó a su domicilio, destrozando a balazos libros y demás objetos del inmueble.
En mayo de 1976 fue llevado al Destacamento 9 de Julio, en donde vió a un abogado del foro local -allegado a la CNU- quien le dijo: "estamos haciendo cosas por ustedes, incluso por vos, a pesar de que no sos de nuestro palo". El le contestó "digame que hace usted en esta comisaria, porque ni mi familia me puede ver" a lo que el letrado respondió "acá yo tengo amigos" (Oscar Amílcar González declaró ante el TOF el 9 de abril de 2001. En su testimonio afirma que su esposa al concurrir a la Agrupación ADA 601 para entrevistarse con Barda, pudo ver a otro abogado en traje de fagina en el cuartel y también que el 8 de octubre de 1976, cuando un grupo irrumpió en el departamento de José Luis Ponsico, el hijo de Gregorio Nachman, también reconoció a este mismo profesional como parte del pelotón militar. Su declaración se puede consultar en varias páginas web).
En agosto de 1976 fue puesto a disposición del PEN y trasladado en un avión Hércules a la Unidad Penitenciaria IX de La Plata. El 18 de marzo de 1978 le otorgan la opción del artículo 23 de la Constitución Nacional para abandonar el pais, partiendo finalmente el 21 de abril de ese mismo año a la Rep+ublica Italiana. El origen de la persecusión hacia el gremialista, se origina en las crónicas escritas para medios nacionales, sobre los autores del asesinato de Silvia Filler y en su activa militancia peronista en defensa de los intereses de los trabajadores del sector.-
José Luis Ponsico, otro periodista del diario "La Capital", rastreó el paradero de Amílcar González por todas las comisarias de la ciudad y gracias a una infidencia, pudo ubicarlo en la "Cuarta", hecho que le salvó la vida.
Este amigo y compañero, relata haber recibido a los tres días del secuetro un llamado de la agencia de noticias Telam. "Gonzalez está en la Cuarta detenido y en muy mal estado, muévanse porque lo golpearon mucho....le decian....Que por esto se contactó con un policia de la Cuarta a quien conocia de su paso por Tribunales, su nombre era Marcelino Blaustein y se entrevistó con él, junto con el hermano de González, en dicha dependencia. Que al principio negó todo hasta que se paró, cerró la puerta y le dijo: mirá flaquito me juego la carrera, González está mas muerto que vivo, lo estamos recuperando nosotros. Lo tiraron acá para que se muriera, el único que puede venir acá sos vos, ocupante de los antibioticos"(declaración de Ponsico ante el TOF).-
La actuación de Ponsico motivó de parte de algunos integrantes del directorio de matutino, una persecusión a los miembros del Sindicato de Prensa, del cual él también formaba parte, hasta que a fines de mayo de 1976 fue despedido del diario "La Capital". La indemnización se pactó en cuotas documentadas mediante varios pagarés, que le fueran robados de su domicilio cuando una patota militar irrumpió en el mismo.A pesar de que posteriormente las autoridade del diario reconocieron la deuda, este hecho y las inexistentes condiciones de seguridad en la ciudad, le hicieron radicarse en Buenos Aires.(Se refiere a los integrantes del directorio del Diario La Capital en el año 1977)
JULIO VICTOR LENCINAS
Integrante del Sindicato Obrero Marítimos Unidos y secretario del "Movimiento Nacional Marítimo Peronista", fue arrestado el 26 de marzo, en la oficina del gremio del cual era Secretario General. Un pelotón de la marina, que se trasladaba en un camión, fueron los encargados de la detención. Inmediatamente encapuchado, es llevado al ESIM, donde estuvo dos días antes de ser trasladado a la Base Naval, para posteriormente ser ubicado en la sede de la PFNA de Mar del Plata.
En un calabozo de esa dependencia permaneció siete días sin comer, hasta que lo colocan en una celda contigua a la que se encontraban Battaglia y Molina, Después llegó detenido José María Musmecci, despachante maritimo a quien en una discusión con autoridades de la Prefectura, le costó la libertad, El maquinista Pawlosky cayó a continuación. Aproximadamente el 16 de abril, junto a Molina y Bataglia fue llevado a "La Cueva", en donde recibieron la visita de un mayor del ejército de apellido Oliva, que les devolvió sus pertenencias. El día 26 de abril se lo envia al Penal de Sierra Chica junto a Basabe, Garamendy y el joven Serra, cuyo padre, integraba el directorio de la Clínica de las Fracturas, sanatorio privado local, aunque debido a un error administrativo, se los derivó posteriormente a Mar del Plata, en lugar de Sierra Chica, el destino fijado era la Unidad 9 de La Plata.(Julio Victor Lencinas declaro ante el TOF el 12 de febrero de 2001 y recuerda a la cárcel de Sierra Chica como una de más tenebrosas que haya transitado, ya que por su condición de gremialista estuvo varias veces detenido en anteriores oportunidades.También declaró en 2010 en el juicio a la Base Naval)
El 1 de mayo, es traido, después de un aterrador viaje, a la Comisaria Cuarta de Mar del Plata. Nuevamente trasladado al penal de Villa Devoto junto a otras 50 personas, es entregado por los militares a los guardiacárceles. El posterior destino fue la Unidad Penal IX de La Plata, a la cual llega por el 27 ó 28 de septiembre donde es recluido, en un pabellón, habitado mayormente por sindicalistas, Al año siguiente por la misma época, recupera la libertad, Su espoa afirma haber visto en la oficina de Barda a varios abogados del foro local, con carpetas bajo el brazo en epera de ser atendidos, a más de tener conocimiento deltrato que mantenían con el Teniente Coronel Costa, del Servicio de Inteligencia del Ejercito(Es declaración se puede consultar, como otra en las páginas web que se hicieron eco de los testimonios del Juicio por la Verdad)
Convocado por Eduardo Ullúa a un estudio jurídico de Rawson y Alsina, se le ofreció señalar a los empresarios con deudas ante la Dirección General Impositiva, a locual se negó, teniendo entendido que por ese entonces quien le realizó la propuesta trabajaba en el Fuero Judicial Federal de Mar del Plata.Su esposa le comenta que, días antes a su liberación, esta misma persona le habia anticipado dicho acontecimiento-
JORGE FERNANDO PAVLOVSY
De oficio maquinista en barcos pesqueros, llegó a puerto el 28 de marzo de 1976. Al dia siguiente, fue allanado su domicilio por tres personas maquilladas y con pelucas, que reconoció como integrantes de la Marina, al enconrarse ya detenido en la Base Naval. Se lo interrogó acerca de personas cuyo paradero desconocia, Llevado a la sede de la Prefectura local, se encontró con otros detenidos: Battaglia, Lencinas, Musmecci, Sotelo. Estando en esas celdas, observo cuando el capellán de la Base , llegó para visitar a Pablo Lerner quien habia sido privado de su libertad el 28 de mayo de ese mismo año.
También recuerda la presencia de un grupo de oficiales que recorrian los calabozos como si se tratase de una visita guiada o de algun tipo de inspección interna de la fuerza. La Prefectura Naval, admitió tenerlo detenido bajo su jurisdicción hasta el 16 de junio, al contestar un recurso de habeas corpus. Dos días mas tarde lo pasaron la Base Naval y a disposición del PEN, siendo traladado finalmente a la Unidad Penal IX de La Plata.
JOSE MARIA MUSMECI
Agente Maritimo en el Puerto de Mar del Plata. Su historia es similar a todas las demás. El 25 de marzo un grupo de militares con intenciones de detenerlo se presentó en su domicilio, sin ubicarlo. A raíz de ello, deambuló varias horas por la ciudad sin saber que actitud tomar, hasta que acompañado de su padre y un directivo de la Cooperativa de Pesca local, se presentó en la sede de la Prefectura, donde quedó detenido unto a quienes ya se encontraban allí, como Pablovsky, Molina, Battaglia y Lencias. Fue trasladado en varias oportunidades a la Base Naval, hasta que en el mes de mayo quedó recluido definitivamente en esta última dependencia, atravesando distintos interrogatorios y toda forma de violencia,
Los interrogadores querían conocer nombres de compañero y tenían especial interes en conocer detalles de las actividades de su amiga Nora Inés Vacca (desaparecida desde el 16 de noviembre de 1976 según declaró Musmeci ante el TOF).
En el mes de septiembre fue trasladado definitivamente a la Unidad Penal IX de la ciudad de La Plata.Recuperó su libertad el 4 de febrero de 1977, cuando mediante el Decreto Número 291, cesó su puesta a disposición del PEN, Nunca olvidará "aquel viajo en avión " a la ciudad de La Plata. Encadenados a una especie de largo caño, sujeto en forma horizontal al interior del avión, Justo Alberto Alvarez y él, eran los mpas cercanos a la puerta de la aeronave y constantemente amenazados, de ser arrojados al vacio.
(*) Fragmento del libro "Luna Roja. Los Desaparecidos en las Playas Marplatenses" del Historiador, investigador y abogado Carlos Bozzi, La obra fue actualizada y reeditada en octubre de 2012.La primer edición data del año 2007.-
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