La Argentina que supo y pudo ser la primera económica de la denominada América Latina, hoy ha quedado
relegada al cuarto lugar, detrás de Brasil, México y Colombia.
Somos gracias a los gobiernos K un país de cuarta.
Por ello no se debe tanto a los adelantos de los países que nos preceden, sino, en gran porcentaje, a las políticas retardada y socializar de estos gobiernos del matrimonio surero cuya versión femenina se instaló para hacer lo que somos o, mejor dicho, lo que dejamos de ser.
Resulta insólito que ello no sea obra de un error , por el contrario es notorio el empeño y esmero con que se lleva a cabo esta degradación que padecemos. Que loable seria haber puesto esas fuerzas para el progreso y la justicia en la Argentina. Pero no, lo han hecho para el atraso, el estatismo, el odio y la corrupción.
Son ya muchos años de aguantar bajo la excusa de esta democracia meramente numérica con marcado irrespeto a la República, los Partidos Políticos, las Fuerzas Armadas y las Organizaciones Sindicales y reemplazados por estrafalarias ONG con o sin pañuelos blancos .
Por eso la pregunta " Cuanto mas hay que esperar" que nos lleve esta insensata mujer al quinto puesto? No!
Hay que transformar esa multitudinaria y espontánea manifestación del 13 de setiembre en una verdadera fuerza politica restauradora de la República y de los derechos.