miércoles, 2 de junio de 2010

EL TITULAR DE LA CGT HUGO MOYANO ALENTO LA REAPERTURA DE LAS PARITARIAS,PERO PIDIO LIMITES

La reapertura de las paritarias conserva su presencia en las secciones económicas que, esta vez, fijan la atención en la reunión que mantuvieron (con “cruce de imputaciones y chicanas”), integrantes de la Confederación General del Trabajo (CGT) y de la Unión Industrial Argentina (UIA), con el fin de acordar una “agenda común”. Clarín, con Carlos Galván, rotula “Moyano alentó la reapertura de las paritarias, pero pidió límites”. Así, apuntala que “Dijo que el 35% que obtuvo la Alimentación ‘no es el parámetro’”. Por otra parte, estipula que la CGT y la UIA “se cruzan duro” por las paritarias, luego de “compartir un desayuno” para “discutir el impacto en el empleo de la crisis internacional”. En la página 6, Eduardo van der Kooy opina que “Son los sindicatos, con sus reclamos salariales, los que colocan como nadie en ridículo las políticas oficiales sobre precios y los números que, imperturbablemente, difunde cada mes el INDEC”. La Nación edita que “los participantes no pudieron evitar sustraerse –en algunos intercambios informales- de la polémica por las negociaciones salariales y las propuestas por reabrir las paritarias”. Tomás Lukin, en Página/12, prefiere encabezar “La negociación que nunca se termina” para fijar la lupa en el “round aparte” que mantuvieron el diputado del Frente para la Victoria (FpV), Héctor Recalde y el presidente de la UIA, Héctor Méndez, en relación al proyecto del diputado “para garantizar la participación de los asalariados en las ganancias y el control de las empresas”. Ambito Financiero agrega que, en la UIA, “cuatro de los mayores grupos económicos que actúan en su seno, Arcor, Ledesma, Techint y Aceitera General Deheza, no participaron del encuentro con la CGT”. El Cronista, con Elizabeth Peger, exalta la “promesa” de Moyano de que la pauta salarial no será en torno al 35% para “calmar la preocupación empresaria”. Luego, con Natalia Donato, el diario económico apunta que el ministro de Economía, Amado Boudou, “envió la señal de que no habrá desde el Gobierno límites a la discusión de aumentos salariales”.

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