La resolución adoptada desde la Secretaría de Comercio Interior, que obliga a las estaciones de servicio y petroleras a retrotraer los precios de los combustibles a los vigentes antes del 31 de julio, generó fuertes críticas y discordias en casi todo el territorio nacional. Sin embargo, en Mar del Plata la medida fue acatada por la totalidad de las empresas de bandera que prestan servicios en la ciudad. Sólo una de estas firmas debió bajar en cuatro centavos los valores de comercialización del combustible. El resto no había implementado subas durante agosto.
Así lo informó Cristian Santiago, gerente general de la Cámara de Expendedores de Combustible,señalando que fue Shell la única firma que debió descender sus precios en dos de sus fórmulas: la diesel común y la nafta súper.
“Es que había contraído aumentos después del 31 de julio”, argumentó la autoridad. Así que el diesel debió volver a costar $3.699 y la súper, $4.299.
“Por su parte, YPF, Petrobrás y Esso aumentaron los combustibles antes de esa fecha, por lo que no se ven afectados por la resolución de la Secretaría”, explicó Santiago.
Consultado sobre la postura que desde la Cámara de Expendedores tienen de la medida nacional, el empresario acotarse a destacar el cumplimiento a la ley de las firmas radicadas en la ciudad. “En Mar del Plata la disposición se adoptó y se está cumpliendo, más allá de estar o no de acuerdo”, deslizó.
La resolución, que lleva la firma de Guillermo Moreno, fue publicada el miércoles en el boletín oficial, por lo que desde entonces entró en vigencia. En ella se establecen una serie de considerandos que argumentan la medida adoptada por el gobierno nacional a través de la Secretaría de Comercio Interior. “Que resulta prioritario para la población, tener asegurados precios razonables en los hidrocarburos y sus derivados en todo el territorio nacional, evitando, de esta forma, el quiebre de la proporcionalidad con la realidad económica”, es uno de esos fundamentos.
Por su parte, el secretario General del Sindicato de Obreros de Estaciones de Servicio, Garajes, Playas de Estacionamientos y Lavaderos Automáticos, Fracisco Arcuri se mostró preocupado por el futuro del sector, luego de la resolución del Gobierno.
“En la actualidad no es redituable tener una estación de servicio ya que los costos han aumentado notablemente. Nuestro temor radica en que con esta nivelación de precios, los números no cierren a las estaciones y decidan cerrar” aseguró el gremialista al tiempo que agregó: “De esta manera quedarían muchos trabajadores en la calle, más de los que ya hay debido al importante cierre de estaciones que ha sufrido el país y la ciudad, particularmente, en los últimos años”.
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