Lo reconocen dirigentes gremiales de La Fraternidad. En la estación de Mar del Plata no se venden pasajes hasta que no se normalicen los servicios.
Luego del accidente que protagonizaron la semana pasada dos trenes a la altura de la estación San Miguel, las demoras y cancelaciones en servicios que debían partir a Mar del Plata pasaron a ser moneda corriente.
“Nos acostumbramos a trabajar mal, arriesgando la vida de los usuarios y la nuestra”, destacó el titular del gremio de La Fraternidad, Omar Maturano, quien confesó que luego de ver a sus compañeros (los conductores de los trenes involucrados en el accidente del pasado miércoles) “saliendo esposados como criminales”, el hecho los llamó a la realidad y a advertir que “no” estaban exigiendo lo que debían exigir”.
“Los conductores hacen lo que pueden, tratan de circular, aunque varias veces pedimos que la inversión sea mayor”, subrayó.
Tras asegurar que los trenes que no salen a Mar del Plata es porque no quieren “seguir trabajando en las mismas condiciones”, destacó que “lo que pasó la semana pasada le puede pasar a cualquiera”.
Esto es porque –en palabras de Maturano– “8 de cada 10 formaciones de Ferrobaires no están en condiciones de circular y de las cinco locomotoras con que cuenta la empresa anda una sola; las otras locomotoras son prestadas de otras compañías concesionarias”.
Maturano confirmó, además, que se reunieron con Antonio Maltana, el interventor en Ferrobaires para expresarle su voluntad de “colaborar”.
“Él (por Maltana) tiene predisposición, quiere aportar sus conocimientos al ferrocarril, pero no depende de él, sino del presupuesto de la Provincia”, finalizó.
Fuente Punto Noticias
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