domingo, 11 de diciembre de 2011

EL GOBERNADOR DANIEL SCIOLI GIRO FONDOS A LA SUPREMA CORTE PARA DESENVOLVIMIENTO DEL PODER JUDICIAL

La tensión que se generó hace algunas semanas entre la Suprema Corte y el gobierno bonaerense ante el reclamo de una deuda de 27 millones de pesos planteado por el alto tribunal, comenzó a ceder en las últimas horas a partir de la decisión de la administración de Daniel Scioli de depositar cerca de 4 millones de pesos en las cuentas del Poder Judicial.
Según trascendió, la Provincia se comprometió a atender el reclamo de fondos en tres pagos. El primero se canceló en las últimas horas y consistió en los mencionados 4 millones. Pero además habrá una cuota por 11 millones antes de fin de año y el resto de la deuda reclamada por la Corte se cancelará en los primeros días de enero.
El plan de pagos fue acordado por el saliente ministro de Economía Alejandro Arlía, y el presidente del alto tribunal, Eduardo Pettigiani.
Fue precisamente Pettigiani, quien en tono severo, reclamó por carta a Scioli el giro de fondos. Si bien el acuerdo no alcanzaría para satisfacer las necesidades financieras de la Justicia, al menos descomprime la tensa situación que la mora había generado entre los dos poderes del Estado.
Como se recordará, la Corte había exigido la remisión "urgente" de 27 millones de pesos para hacer frente a deudas impagas con proveedores y contratistas que, según el Tribunal, habían afectado la operatividad de las 18 departamentales judiciales a un punto tal que ponían en riesgo la continuidad del servicio de Justicia en la Provincia.
"Los proveedores ya no se presentan a cotizar en los distintos procedimientos de contratación que se procuran llevar adelante, atento a que no se han abonado sus facturas anteriores, holgadamente vencidas, ni tampoco se les da fecha cierta para su cancelación", había advertido la Corte.
En el alto tribunal también destacan un hecho recurrente. Cada vez que se discute el presupuesto, el Poder Judicial obtiene menos fondos de los que considera necesarios para funcionar.
"Este estado es de una magnitud tal que trasciende las meras dificultades que se han venido sorteando con denodados esfuerzos, toda vez que repercute de manera sensible y significativa en el desenvolvimiento de la actividad, afectando el normal desenvolvimiento del servicio que se encuentra en la actualidad seriamente comprometido", había advertido el presidente de la Suprema Corte.

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