miércoles, 30 de mayo de 2012

RECUERDAN A 53 AÑOS DE SU FALLECIMIENTO AL PENSADOR Y MILITANTE NACIONAL RAUL SCALABRINI ORTIZ

Desde la agrupación “La Scalabrini”  de Mar del Plata consideramos que este 30 de mayo no es una fecha cualquiera, ya que se cumplen 53 años del fallecimiento de un pensador, escritor y militante cuyas ideas son una guía en el rumbo de la militancia en este Proyecto Nacional, Raúl Scalabrini Ortíz.
Tal como hicimos hace una semana, cuando conmemoramos un nuevo aniversario del fallecimiento de Arturo Jauretche, otro gran pensador nacional –y amigo entrañable de Scalabrini Ortíz-, tomamos esta fecha para recordar el coraje, las ideas y el legado eterno que dejó quien nos inspiró para el nombre de nuestra agrupación.
Raúl Scalabrini Ortíz nació en 1898 en Corrientes, de joven llegó a la Capital Federal para estudiar Ingeniería en la Facultad de Ciencias Exactas, donde rápidamente comenzó a destacarse en los círculos de intelectuales por su gran capacidad. Fue agrimensor de profesión, pero también fue un pensador, historiador, filósofo, periodista, escritor, ensayista, poeta, y participante del revisionismo histórico.
Su gran amistad con Arturo Jauretche y Homero Manzi lo llevó a integrar FORJA (Fuerza de Orientación Radical de la Joven Argentina) en la década de 1930. Allí, demostró su vocación por la militancia en el campo nacional y popular, y escribió textos sobre la realidad social argentina, que mantienen una clara vigencia en la actualidad.
A mediados de los años ’30, fue desterrado a vivir en Europa, donde lejos de apaciguar su militancia, aclaró aún más su visión respecto al sometimiento de Argentina con otras potencias. Scalabrini mostró su indignación al ver que en países como Italia y Alemania se referían a Argentina como una “colonia del imperio británico”.
Al regresar al país, Scalabrini Ortíz escribió importantes libros y ensayos sobre la dependencia argentina, enfrentándose a los poderes económicos de nuestro país. Uno de los temas a los que más se avocó fueron los ferrocarriles en Argentina y los intereses extranjeros involucrados. Posteriormente, con el surgimiento del Peronismo, demostró su coherencia con el pensamiento nacional y popular, y apoyó al movimiento social del 17 de octubre de 1945, al General Perón y su gestión.
No obstante, se mantuvo alejado y fue crítico con el Partido Justicialista, pero logró un gran reconocimiento por sus ideas progresistas que en ningún momento calló y pronunció siempre con ánimos de construcción al movimiento político y social.
Raúl Scalabrini Ortíz se opuso con firmeza al derrocamiento de Perón en 1955 y fue un ferviente opositor de la autodenominada Revolución Libertadora, a la que caracterizó como la vuelta de las oligarquías nacionales al servicio de intereses extranjeros.
Desde la agrupación “La Scalabrini”estamos orgullosos de llevar el nombre de este reconocido pensador y militante, porque creemos que las ideas revolucionarias que él planteó hace ocho décadas, siguen teniendo vigencia en nuestro país.
Aquellos poderes económicos que Scalabrini Ortíz enfrentó con sus ideas, con su pluma, y con su cuerpo, mantuvieron su nefasto poder durante el resto del siglo XX, amparados en los más sanguinarios gobiernos de facto, dejando duras consecuencias.
Las figuras de hombres como Manzi, Jauretche y Scalabrini Ortíz han sido ocultadas desde los sectores intelectuales más conservadores durante décadas, pero gracias a las conquistas del Proyecto Nacional iniciado por Néstor Kirchner y encabezado por la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, debemos tener presentes a estos hombres que con admirable coraje defendieron los intereses nacionales y de los más humildes.
Desde nuestra agrupación homenajeamos a Raúl Scalabrini Ortíz y reafirmamos nuestra convicción de defender la lucha y los valores que él representó. Consideramos que esa una guía en nuestro camino militante, porque sabemos que el pensamiento nacional tiene un fuerte sustento histórico en la vida y obra de estos patriotas que dejaron en claro que los grupos concentrados al servicio de los poderes extranjeros no deben gobernar en Argentina, y es una lucha que tras décadas de vaciamiento del Estado, se inició aquel 25 de mayo de 2003 en que Néstor Kirchner asumió como presidenta de la Nación para mantenerse hoy en día con mucha fortaleza.

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