AMADO BOUDOU, SINDICADO COMO AUTOR DE COIMAS Y NEGOCIADOS QUE PERJUDICAN AL ESTADO LLEGA AL PAIS Y ASUME INTERINAMENTE LA PRESIDENCIA DE LA NACION

Luego de una semana por Centroamérica, en medio de
 la cual se enteró del procesamiento en la causa Ciccone,
 Amado Boudou regresa esta noche a Buenos Aires. No
 estará en la sesión del Senado de esta tarde, donde los
 legisladores de UNEN le pedirán que se tome una licencia 

Pero sí llegará justo a tiempo par a asumir 
la Presidencia provisoria ya que Cristina
 Kirchner viaja esta noche a Paraguay.

Boudou participó ayer en Panamá de los actos
oficiales por la asunción del presidente Juan
Carlos Varela y evitó nuevamente a la prensa.
 Tras dos días de ostracismo, en los que apenas
 se movió del para participar de actividades cerradas, el vicepresidente procesado por cohecho y negociaciones

 incompatibles fue a la asunción de Juan Carlos
Varela en representación del Gobierno argentino.

Cerca del mediodía llegó al estadio Rommel Fernández.

Boudou llegó puntual y solo. Los demás jefes
 de las 20 delegaciones fueron transportados juntos
 desde el Hotel Sheraton, donde se alojan las comitivas.
 Pero el vice no durmió allí, donde lo había hecho
la noche del domingo, al llegar a Panamá procedente
 de La Habana. Por temor al contacto con la prensa,
 buscó que su paso quede en el más absoluto
 secreto: ni los encargados del protocolo sabían dónde
 se hospedó su última noche.

Hacia las tres de una tarde pesada y húmeda, Varela
recibió el saludo oficial de representantes de todo el
 mundo en la Presidencia. Boudou llegó con tres
 acompañantes pero se fue antes de estrechar
 la mano del presidente, que solo fue felicitado
 por la embajadora argentina Ana Berta de Alberto.

El hecho de que la argentina fuese la única delegación
 representada por una sola persona llamó la atención
 del entorno de Varela, según dijo un funcionario
 panameño .

El vice argentino ni siquiera se arrimó al brindis
 que ofreció la vicepresidenta panameña Isabel Sain
 Malo, que sí fue aprovechado por políticos y
diplomáticos a quienes se vio pasear con copa en mano
 en un coqueto edificio del casco antiguo de la ciudad,
 a la orilla del mar.

Boudou prefirió quedarse en el Palacio de las Garzas,
 un edificio de estilo andaluz que se alza en una calle
 adoquinada del mismo casco, en el hermético almuerzo
 con el que el nuevo presidente panameño convidó a jefes
de Estado.

Ya en su paso por Cuba, la visita de Boudou había carecido
 de brillo y relieve político, al no lograr un encuentro con los
 hermanos Fidel y Raúl Castro.

El vice sólo participó de actividades menores en la isla,
 acompañado por su secretario privado, Eduardo Romano.
 Allí lo sorprendió el procesamiento.