domingo, 20 de junio de 2010

ASIMETRIAS INFAMES





* José Luis Jacobo
www.noticiasyprotagonistas.com


Está visto que no somos todos iguales, ni aun cuando morimos. Algunos muertos generan una fuerte conmoción social, otros son ignorados, incluso cuando su muerte sea de la más horrible carnadura que un ser humano le pueda provocar a otro.Como ejemplo de esta falta de igualdad puedo citar aquí dos casos: el homicidio de Brian Haik (ver edición del 09/04/2010 de Noticias & Protagonistas), caso en el que su asesino aún continúa libre e impune, y el tráfico de drogas, disparador del asesinato, sigue siendo un dato insoslayable de la cotidianeidad del barrio Libertad. El otro es el homicidio de Hugo Emiliano Disalve, de 27 años, padre de dos hijos -su segunda niña nacía al momento en que lo asesinaron-, joven por el que esta sociedad que se parte en pedazos y mira por sobre el hombro al otro, tampoco ha marchado como sí lo hizo por otras vidas robadas, también injustamente.
Los hechos que han sido relatados en los diarios de la ciudad en referencia al asesinato de Disalve no llegan a reflejar en toda su magnitud el tremendo crimen que han perpetrado tres sujetos que, según estiman los investigadores, tenía por objeto más matar que robar. No ocurrió en el centro o en un barrio tradicional de Mar del Plata, sino allí donde la crónica periodística sitúa “lo periférico”, como pareciendo describir en ese adjetivo lo que a nadie importa, lo marginal, lo anecdótico. Y resulta que la izquierda gárrula de la ciudad, esa que moviliza a un grupete de pobres chicos con patéticas banderas rojas por un boleto estudiantil, los mismos que saltan de alegría porque luego de seis años un tribunal condena a un suboficial de Aeronáutica al que le tiraron encima todos los horrores cometidos aquí durante la dictadura, no se incomoda por la seguidilla de crímenes perpetrados en contra de un colectivo que clama por democracia y ruge por justicia y no obtiene ninguna de las dos cosas. Disalve circulaba en su moto por el barrio General Belgrano, un ámbito conocido para él -su madre es oriunda de esa barriada que surgió en la década del ’70-. Cuando los tres criminales que lo abordaron para matarlo se le fueron encima, conversaba por teléfono con su esposa, que había dado a luz por cesárea a una niña y estaba todavía internada en el Hospital Materno Infantil. Crueles hasta lo indecible, luego de balear a Emiliano, tomaron el celular y le dijeron a la mujer: “dejá de hablarle al negrito, ya te lo matamos y te lo dejamos tirado acá en medio del campo”. De los tres delincuentes, dos de ellos son menores y están a disposición de la fiscal Mariana Baqueiro, obviamente gozando de la protección estatal que impone el carácter constitucional de la Convención Internacional de los Derechos del Niño.El papá de Emiliano, Hugo, de 54 años, 10 hijos, 8 nietos, albañil que ha llevado una vida adelante trabajando duramente, revela con una simpleza que conmueve el alma: “esta familia era toda alegría, ahora nos quitaron todo”. Dice además estar muy enojado con el intendente Pulti, por ser “el responsable de cuidarnos a todos”.La jornada en que asesinaron a Emiliano Disalve nadie se hizo presente en el sitio de la tragedia o en la casa de la familia. Ausente: Gustavo Arnaldo Pulti. Ausente: Ariel Ciano. Ausente: el jefe departamental Osvaldo Castelli. Ausente: el jefe distrital sur Eduardo Perique. Ausentes todos los concejales, que sí estuvieron en otros crímenes ocurridos en los circuitos electorales de clase media y media alta. Es decir, allí donde todos creen que se cocina la suerte de una elección, y en donde poner la cara en un episodio trágico cuenta a la hora de votar. Nadie que se precie de ser democrático debería actuar de esta manera, asimétricamente infame.

2 comentarios:

MARIA FERNANDA PANIZO dijo...

Perfectamente descripto. Hechos de esta naturaleza acongojan a todos los ciudadanos y parece que nadie se da por enterado. Sólo unas pocas voces salen a quejarse de la impulcritud con que algunos policías, jueces y fiscales tratan la problemática. Ojala que cada vez seamos más en Mar del Plata, los que no nos callamos y denunciamos los hechos de corrupción o "sedentarismo" que se dan detrás de delitos como estos. Y si nos ponemos a recordar tiempo atrás tenemos los casos del mal llamado "loco de la ruta", como ejemplo de la impunidad que reina en nuestra querida ciudad de Mar del Plata.

Anónimo dijo...

hola soy silvia estoy de acuerdo tenemos ua justicia de mierda emiliano era una exselente persona estava feliz por el nacimiento de mia y vinieron tres hijos de puta y lo mataron tan solo por una moto yo quisiera sver que ase la fiscal porque no livera la orden de captura o sera que este delincuente travaja para ella y por eso gosa de livertad es para pensar esta mujer como puede dormir tranquila mientras una gran familia sufre que tenemos que aser justicia por mano propia dejaron 2 nenas sin padre