Un reconocido bar de la calle Alem fue clausurado este fin de semana durante un control a cargo de la dirección de Inspección General, tras constatarse que el local superaba ampliamente el límite de su factor ocupacional
Según informaron fuentes del municipio, el comercio situado en Alem al 3800 se encuentra habilitado para recibir a 220 personas. Sin embargo, al momento de hacer la inspección el personal a cargo de la misma detectó que en su interior se encontraban 352 personas.
Los operativos se realizan en el marco de la política de la secretaría de Gobierno cuyo objetivo consiste en que se respete la normativa vigente, que se cumpla con las condiciones de seguridad, mejorare la convivencia en diferentes zonas, y se preserve la salud y la vida de quienes asisten a estos lugares, pero también de quienes trabajan en los mismos
La dirección de Inspección General, acompañada por la policía, desarrolló a su vez verificaciones de funcionamiento a los locales nocturnos ubicados en la zona de Constitución, Alem, Irigoyen y Centro.
Así, tuvieron que clausurar el local ubicado en Alem al 3836 por violar el factor de ocupación. Además, el local de Alem 3728 debió ser infraccionado por desarrollar actividades en un rubro para el cual no está habilitado.
Este último local, al momento de hacerse presente el cuerpo de bomberos con el titular de Inspección General, estaba convertido en un local bailable, hecho que motivó el labrado del acta contravencional. A fin de evitar la posible clausura, el titular del comercio decidió suspender la actividad en forma inmediata. circunstancia que impidió realizar la verificación del factor de ocupación que se presume también se encontraba ampliamente violado.
Secuestros por alcoholemia positiva
En el marco de los controles que el personal de Tránsito lleva adelante cada fin de semana, entre el viernes y la madrugada de ayer se realizaron 35 verificaciones, de las cuales tres dieron positivas con lo cual se procedió a secuestrar estos vehículos. Luego, se decidió interrumpir el control a altas horas de la madrugada ya que la lluvia podía poner en riesgo la seguridad del operativo.
Vale destacar que las tareas de alcoholemia fueron coordinadas por el director de Tránsito, Rubén Mansilla, y participó la Policía de Seguridad Vial de la provincia de Buenos Aires y la Agencia Nacional de Seguridad Vial, con un fuerte acompañamiento policial.
Se realizan en el marco del programa de Seguridad Vial que impulsa la secretaría de Gobierno con el objetivo de que se respeten las normas de circulación, disminuyan los siniestros viales, se eviten los excesos y se preserve la salud y la vida de los vecinos.
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