Los primeros ocho meses de 2010 cerraron con un alza acumulada de los precios en torno al 16,5%, lo que ubica la inflación anualizada en 26% y el promedio mensual en 1,9%.
Los productos que conforman la canasta básica de alimentos aumentaron más del 19 por ciento en los últimos cinco meses en Mar del Plata, según un relevamiento de la consultora Ayala. El azúcar y las frutas encabezan el ranking de las mayores subas con un 66% y 45%, respectivamente. En octubre, una familia tipo de 4 integrantes -conformada por un hombre de 36 años, su esposa de 33 y dos hijos de 8 y 5- necesitó 1.230 pesos para no ubicarse por debajo de la línea de indigencia, es decir, simplemente para cubrir sus necesidades básicas de alimentación.
Los productos sufrieron un fuerte incremento entre junio y lo que va de noviembre. En ese lapso, la batata subió más del 36% y la carne 27% -el precio varía de acuerdo a los cortes y la calidad-. En tanto, los fideos, el té y la yerba aumentaron un 20%.
Para no quedar debajo de la línea de pobreza una familia tipo requirió tener un ingreso de $2.656 en octubre, mientras que una persona necesitó $861, según reveló la licenciada María Eva Ayala, jefa de proyectos de la consultora.
En junio, la canasta básica de alimentos -compuesta por 60 productos- presentó un costo de $334 para un adulto. Y en el último relevamiento correspondiente a octubre ascendió a $398. Esa suma requiere una persona para no ubicarse por debajo de la línea de indigencia.
El relevamiento se hizo en supermercados, almacenes, carnicerías y verdulerías de diversos barrios de la ciudad. "Tuvimos en cuenta el nivel de demanda de los consumidores en base a estudios de mercado realizados por la consultora", explicó Ayala. Y enseguida agregó: "El sondeo incluyó primeras, segundas y terceras marcas de cada producto. Además, tomamos como muestra diferentes cortes de carne, hortalizas y frutas de estación".
Para la elaboración del informe, la consultora utilizó los criterios correspondientes a la canasta básica de alimentos elaborada por el Indec (Instituto Nacional de Estadística y Censos), que tiene en cuenta los hábitos de consumo de la población.
"El costo de la canasta se calcula de acuerdo a las necesidades de un hombre de entre 30 y 59 años. Y para proyectar el valor de los alimentos familiares se determinan las unidades consumidoras para una composición del hogar tipo, en este caso, de Mar del Plata", sostuvo Ayala.
La canasta, que está compuesta por una serie de productos básicos para la subsistencia durante un mes de una familia tipo, es la ingesta mensual promedio de alimentos que el Indec usa para determinar el índice de precios al consumidor, es decir, el costo de vida.
Los especialistas advierten que es más preocupante que la suba se produzca en los alimentos de primera necesidad porque no pueden ser reemplazados y afecta fundamentalmente a los sectores de menores recursos.
La inflación sigue corriendo más rápido en los sectores necesitados de la sociedad, según las mediciones que realiza el Indec. Las canastas de alimentos y servicios básicos continúan trepando con más rapidez que el índice de precios al consumidor, según revelan los datos del organismo.
Los primeros ocho meses de 2010 cerraron con un alza acumulada de los precios en torno al 16,5%, lo que ubica la inflación anualizada en 26% y el promedio mensual en 1,9%. En el caso de los alimentos la subas son bastante más importantes, ya que el aumento acumulado asciende a 23% e implica un tasa anualizada de 37% y una promedio mensual de 2,6%.
"Los datos convalidan la hipótesis que veníamos manejando: la inflación se acelerará hacia fin de año, tanto por factores estaciones, como del esquema de política económica (incremento del déficit económico del gobierno nacional y financiamiento del mismo vía emisión monetaria)", dice un informe del Indec.
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