El ministro de Planificación aseguró que existen operaciones “ridículas” que apuestan al fracaso de un acuerdo tripartito. En el gobierno creen que el Grupo Clarín y Techint están detrás de esas maniobras periodísticas.
El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, salió ayer con los tapones de punta y denunció que existen sectores interesados en que fracase el acuerdo social tripartito entre el gobierno, los empresarios y los sindicatos.
“Más que especulación, hay operaciones que son rídiculas, incluso citan fuentes que no existen”, respondió el ministro de Planificación cuando fue consultado en el Centro Atómico Ezeiza acerca de los rumores periodísticos. Y De Vido fue más allá en sus declaraciones. Dijo que los que apuestan por el fracaso del acuerdo social tripartito son aquellos que “hablaban de que nosotros estábamos crispados”, e inmediatamente agregó: “los que están crispados son ellos, no hay que dar nombres, no vale la pena... Dejémoslos a ellos con sus operaciones mediáticas. Ni siquiera pueden inventar una fuente, porque no bien las nombran, los desmienten”. Aunque no los mencione, De Vido se refiere al aluvión de cuestionamientos que recibió en los últimos días el Pacto Social por parte del diario Clarín y de los satélites periodísticos que pertenecen al mismo multimedio.
Dentro del gobierno existen fuertes sospechas de que Héctor Magnetto, CEO del Grupo Clarín, y Paolo Rocca de Techint, están ejerciendo fuertes presiones dentro de la cúpula empresaria para forzarla a abandonar cualquier intento de acuerdo social.
Magnetto, sin embargo, ha encontrado resistencias dentro de la propia Asociación Empresaria Argentina (AEA) para alinear al resto de los empresarios detrás de su cruzada.
De hecho, hace dos semanas, Telefónica de Argentina decidió abandonar la AEA por sus discrepancias con Magnetto y por los reiterados ataques que esta firma recibió desde las páginas del matutino de Ernestina Herrera, la viuda de Noble. Es cierto que en el medio se entremezclan intereses económicos.
En Telefónica hay un profundo malestar por las operaciones judiciales que hizo Magnetto para impedir el ingreso de esta compañía al negocio del triple play, la posibilidad de ofrecer telefonía, televisión e Internet en un mismo combo. Clarín, por su parte, retomó ayer una campaña en la que acusa a Telefónica de monopolio. Sin embargo, detrás de estas chicanas subsiste la indignación de Clarín por el acercamiento de Telefónica al gobierno.
Magnetto ataca a Telefónica, porque cree que si logra quebrar el frente empresario hará tambalear el Pacto Social, una de las prioridades que se fijó la presidenta Cristina Fernández para su cuarto año de gestión.
En este marco, Magnetto salió al cruce de Teddy Karagozian, empresario de la firma textil TN Platex, cuando este intentó un acercamiento entre el gobierno y la dirección de la AEA. A partir de ese momento, las páginas de Clarín se dedicaron a reflejar el supuesto malestar que existe en distintos sectores empresariales y sindicales por el Pacto Social. Ayer, De Vido buscó llevar tranquilidad y dio señales claras de que el acuerdo social sigue su cauce normal.
En primer lugar, ratificó que continuarán trabajando en acuerdos sectoriales como los ya firmados con el sector hidrocarburífero y el minero. Además, el ministro de Planificación confirmó la primicia de Tiempo Argentino y adelantó que la semana próxima, entre el jueves y el viernes, se firmará un acuerdo cuatripartito en el sector de la construcción. Este convenio contempla la participación del gobierno nacional, la Cámara Argentina de la Construcción (Camarca), la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) y una decena de proveedores estratégicos de esta industria. Además, dejó entrever que se avanzará en convenios similares con otros sectores de la economía. En relación con el Pacto Social Integral, De Vido recordó que el líder de la CGT, Hugo Moyano, se verá la semana que viene con el titular de la UIA, Héctor Méndez. “Hay mucha gente que está interesada en que esto no avance, y la verdad es que ya firmamos dos acuerdos y vamos por el tercero, y seguramente en enero y febrero va a haber infinidad de actividades con las que estamos hablando, tanto en mi área como en otras, para poder avanzar en acuerdos que se van a ir viendo”, expresó. Cabe recordar que el jueves pasado Cristina Fernández firmó el convenio con el sector minero. Con acuerdos de este tipo el gobierno busca asegurar las inversiones y garantizar que no existan trabas a la producción, de cara a las negociaciones paritarias del 2011. El próximo sector que se inscribe como meta de las negociaciones que lidera De Vido es Comercio. Representantes empresarios y sindicales ya empezaron a tomar contacto, pero también existen otros sectores en los que se está conversando para lograr acuerdos similares. “Los tiempos la presidenta (Cristina Kirchner) los maneja muy bien, y a los sectores los vemos con enorme vocación de diálogo. Lo veo en Moyano, en Méndez, en (Adelmo) Gabbi, en Jorge Brito, en (Carlos) Wagner: veo enormes posibilidades de hablar acuerdos de fondo, y además nadie habló de fechas”, concluyó
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