CAFIERO BUSCA NOVIA, ESCRIBE UN LIBRO Y ACONSEJA AL PJ

Gabriel Sued para el Diario La Nacion


PINAMAR.- Muy pocos dirigentes están tan identificados con el peronismo como Antonio Cafiero. Sin embargo, él se jacta de que su hijo Juan Pablo, actual embajador argentino en el Vaticano, "fue el único que lo pudo cagar" a Perón. "El general era el padrino de bautismo y cuando lo estaba llevando a la piedra bautismal, Juampi largó una descarga", cuenta, entre risas, mientras almuerza, con una de sus hijas, en el restaurante de Ufo Point, uno de los paradores de moda de esta ciudad.
La anécdota es parte de Militante sin tiempo , el libro de memorias que el dirigente prevé terminar en un par de meses y publicar a mitad de año. Sus días aquí están destinados a la elaboración del último capítulo.
"Empecé a principios del año pasado. Pensé que iban a ser 30 páginas y acá estoy. Tengo 500 páginas y una especie de obsesión con el libro. Me la paso escribiendo, día, tarde y noche. A veces, me pasa que me despierto a la madrugada en medio del sueño sobre alguna historia o anécdota. Entonces, escribo lo que me acuerdo en un block de notas que tengo en la mesa de luz", relata Cafiero, de 88 años.
Las horas de escritura frente a su moderna computadora portátil sólo son interrumpidas por breves visitas al balneario San Javier, ubicado justo frente de su departamento, o por un paseo al centro, en general para comprar algún libro.
Uno de los capítulos que más le costó escribir es el que dedicó a narrar los días que pasó en prisión, en total dos años, en distintos períodos y en once cárceles diferentes, entre 1955 y 1976. "Lo peor fue el simulacro de fusilamiento que nos hicieron en Caseros, en 1956", recuerda. "La vida del político no es distendida. Los políticos de ahora no se parecen a los de mi época. Ahora la pasan mejor", concluye.
Aunque se trata de un libro de memorias, Militante sin tiempo incluye un análisis del presente y el futuro: el último capítulo de la obra está dedicado al kirchnerismo y a los desafíos del PJ. "Es un buen momento del peronismo, pero hay que cuidarlo. Yo le auguro al peronismo un siglo de predominio", dice Cafiero, mientras saborea un sashimi de salmón y toma un sorbo de cerveza.
En la charla con La Nacion, se permite también deslizar un consejo para Cristina Kirchner: "El kirchnerismo es una fase del peronismo y fuera del peronismo no tiene futuro. Si la Presidenta elige ir por otro camino, se va a equivocar feo". Es la única referencia que hace sobre la coyuntura política. Dice que habla con muchos dirigentes que lo llaman para consultarlo, pero no se imagina en el papel de árbitro que algunos le querían adjudicar en una eventual elección interna del PJ.
Como en el libro, en su vida también proyecta. Cuenta que para su cumpleaños 90 dará una gran fiesta. "Ese día tengo que presentar a mi novia", sorprende. "¿Tiene novia?", pregunta La Nacion. "No, pero estoy buscando", replica, con una media sonrisa. "No puedo dejar de mirar a las mujeres", confiesa, y detalla que intentará que su próxima novia sea un poco más joven que él. En la fiesta de cumpleaños que imagina no faltará ninguno de los casi 90 integrantes de su familia: tiene diez hijos, 39 nietos y doce bisnietos. "Todos mis hijos son peronistas y los nietos también. El que no sale peronista, que se busque otra familia", dice con seriedad.