lunes, 14 de junio de 2010

LOS RECLAMOS SALARIALES QUINTUPLICAN LA INFLACION ESTIMADA POR EL GOBIERNO


*Francisco Jueguen
www.lanacion.com.ar

Los acuerdos salariales homologados por el Ministerio de Trabajo quizás funcionen como mecanismo para sincerar la inflación en la Argentina. La realidad afirma que, por lo menos, 14 convenios firmados este año entre trabajadores y empresas prevén incrementos que quintuplican la suba de precios pronosticada por el Gobierno.
Los incrementos de sueldos conseguidos por los sindicatos, entre marzo y junio, muestra un promedio de un 30%. Según un informe de Buenos Aires City (BAC), el pico llegó a un 49%, en el caso de los curtidores (vale aclarar que no recibían aumentos desde 2008), y a un piso de un 21% para el gremio estatal UPCN, fuertemente alineado al Gobierno.
A contramano, el Ministerio de Economía pronosticó en la última Ley de Presupuesto aprobada por el Congreso que la inflación de 2010 sería de un 6,1%. Las mismas cifras oficiales hacen parecer una ficción la variación estimada por Amado Boudou. El Indec reveló en su último Indice de Precios Al Consumidor (IPC) de mayo que la inflación acumulada durante este año ya llegó a un 5,1%.
Vale aclarar que la suba de precios, "la inflación del supermercado", no es la única variable que los gremios miran a la hora de negociar salarios, pero sí la principal. Pesan también las ganancias de las empresas y la situación económica de los diferentes sectores y diversos gremios. No obstante, el valor de los alimentos, que se incrementó fuertemente en los tres primeros meses del año, se convirtió en una razón de peso para la reapertura de las paritarias.
En ese sentido, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), con la que se mide la indigencia, alcanzó un valor de $ 532,21 para una familia tipo, constituida por un matrimonio y dos hijos, lo que implica un alza de 20% respecto de mayo del año pasado. En tanto, la Canasta Básica Total (CBT), con la que se mide la pobreza, se ubicó en 1153,7 pesos, un 15% más que un año atrás.
"El año pasado, muchos comerciantes se comían los aumentos en sus costos [entre los que están las alzas salariales] porque la economía estaba en recesión", afirmó a lanacion.com el economista de Prefinex Osvaldo Cado. "Pero es probable que ahora vayan a precios", indicó el experto que prevé una inflación interanual de entre un 22% y un 25%.
Sin fin. A pesar de los convenios logrados en el pasado, las paritarias no están cerradas. Para el caso, los bancarios, que habían acordado por un 22%, ahora piden un 35%. En tanto, Luz y Fuerza, que había conseguido un 22% en abril, exige también un 35% en el actual contexto. Los hombres de Comercio van por el 34% (habían logrado un 29%). Mientras que ATE, la contracara de UPCN en el Estado, avanza por un alza de un 30%.
"A medida que transcurre el año 2010, de la mano de la aceleración inflacionaria aumentó el porcentaje de aumento salarial otorgado por los empresarios y homologado por el Ministerio de Trabajo", señaló el informe de BAC y agregó: "Los empresarios vinculados al Capítulo Alimentos y Bebidas pudieron otorgar mayores incrementos salariales".
En ese sentido se destacó el caso de los camioneros dirigidos por el líder de la CGT, Hugo Moyano, quien también encabeza la lucha para bajar el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias. Mientras su hijo, Pablo, había anticipado que los camioneros no exigirían más de un 20%, Moyano advirtió la semana pasada que su gremio buscaría un aumento de sueldos de un 31%.

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