por Alejandro Aníbal García (*)
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En 1800 éramos sólo 1.000 millones de habitantes, 2.000 millones en 1925, 4.000 millones en 1974 y 6.000 millones en 1999. En la actualidad rondamos los 6.500 millones. La Oficina de Población de la ONU estima que la población mundial llegará a 9.100 millones para 2050, un 40% más de los que actualmente somos. Según el censo 2010 Mar del Plata tiene sólo 615.000 habitantes y Argentina 40 millones.
Una laguna en un océano de países
La teoría malthusiana de que la población crecerá más rápidamente que los recursos para alimentarnos de manera efectiva al momento ha sido superada en los países desarrollados. Sin embargo, nuevos desafíos se avecinan y si queremos sacar provecho para nuestra ciudad tenemos que estar preparados. Bien es cierto, parafraseando a Marcos Aguinis, que el atroz encanto de ser argentinos nos genera una cierta aversión a planificar, ser estables y previsores. Un desperdicio para el futuro de nuestra patria, o sea el de nuestros hijos y nietos.
Más ancianos, menos jóvenes
Mientras que en los países desarrollados la población se mantendrá estable, en los países pobres y en vías de desarrollo el crecimiento será significativo. Recordemos que los países industrializados concentran sólo el 19% de la población mundial. En 2050 serán 91 los países donde la edad media se situará por encima de los 40 años. En las naciones pobres, la proporción de mayores de 60 años aumentará del 8% actual a un 20%.
La esperanza de vida alcanzará los 75 años, 10 años más que la actual, siendo 82 años en los países desarrollados y de solo 66 en los de menor desarrollo. Todo esto originará serios problemas en lo que respecta al financiamiento de los sistemas de jubilaciones y retiro. Es más, ya lo podemos evidenciar hoy en día en Europa en donde escasea la población activa y joven. ¿Cómo vamos a sostener a un gran número de adultos acostumbrados a un nivel de vida tan alto contando con una población activa tan reducida? Se tendrá que elevar la edad de jubilación, inventar nuevas formas de financiamiento, trabajar más. Ausencia de familia, se reducen los nacimientos.
En el 2005 nacían 2,65 hijos por mujer, la mitad de lo que se registraba en 1955 con 5 hijos por mujer. Ya no existen las tradicionales familias numerosas al estilo italiano con varios hijos, y el tradicional almuerzo los domingos en familia. Las madres solteras igualarán en proporción casi a las casadas. Se estima que esta tasa continuará descendiendo hasta 2 hijos por mujer en 2050. Es importante recuperar el rol social que tiene la familia, aunque sea reducida.
El uso de métodos anticonceptivos creció un 52% dentro de las mujeres. En la década de 1960 la proporción era de solo 38%. El sexo ya no es un visto como un instrumento de reproducción, sino como un bien de consumo tal como es ir al cine, al teatro o leer un buen libro. La única verdad, es la realidad.
Para el año 2050 casi 300 millones de personas habrán muerto a causa del VIH, pese a que se logren nuevos descubrimientos que reduzcan las posibilidades de contagio.
India superará a China en población
Contrario a lo que popularmente se cree, todo indica que antes del año 2030, India superará a China en cantidad de habitantes. ¿La causa? El estricto sistema de control de natalidad utilizado en China en donde su tasa de natalidad promedio es de 1,7 niños por mujer. En India eso no sucede, y su tasa ronda en 3 niños por mujer. A este paso habrá 1.593 indios en 2050. Mientras tanto en China, tan solo 1.425 millones. De ser así, los indios deberán reconsiderar seriamente la creencia popular acerca de la santidad de los bovinos al no ingerir su carne por considerar que albergan en su cuerpo el alma de ?330 millones de dioses y diosas?.
China será la principal potencia económica
Para el año 2030 China e India se convertirán en las principales economías del mundo. Estados Unidos ocupará el tercer puesto y, nuestro vecino, Brasil el cuarto. Según afirma un estudio de PricewaterhouseCoopers (PwC) ?en sólo 40 años, el desarrollo brasileño superará a Japón, Alemania, Rusia, Reino Unido y Francia. De la misma manera, Indonesia saltará del actual puesto 16 al 8 en el 2050, gracias a su crecimiento sostenido. Se prevé que Sudáfrica y Australia salgan del top 20 para ser reemplazadas por Nigeria y Vietnam en las posiciones 13 y 14, respectivamente, a mediados del presente siglo. Así mismo, en el 2050, ni Argentina y Sudáfrica no figurarán en el top 20 de las economías más grandes y fuertes del mundo.? Un motivo más que suficiente para afianzar aún más nuestra alianza estratégica con Brasil.
Energía: petróleo, gas y electricidad
En la actualidad el 39% del consumo energético proviene del petróleo, el 22% a gas natural, el 26% a carbón, el 6% a hidroelectricidad y el 7% de energía nuclear. Si sólo mantuviéramos el consumo actual, me es poco grato advertir que las grandes reservas actuales de petróleo, gas y carbón se agotarían en 50, 65 y 225 años respectivamente. Los nuevos yacimientos que pudiéramos encontrar son factibles, pero su costo de extracción será muy superior al tradicional llevando el precio del combustible a valores muy por encima a los que estamos acostumbrados. La energía del futuro necesariamente tiene que ser la nuclear.
Habrá que aumentar la producción de alimentos en un 70%
En el año 2050 será necesario producir un 70% más de alimentos para los 2.300 millones de personas adicionales. El 75% de la población mundial vivirá en mega-ciudades de más de 10 millones de habitantes, frente al 49 % que lo hace en la actualidad.
La demanda de cereales alcanzará los 3.000 millones de toneladas en 2050.La producción anual de cereales tendrá que crecer en más de 1.000 millones de toneladas frente a los 2.100 millones actuales, como así también la producción de carne en más de 200 millones de toneladas, para alcanzar las 470 millones. La producción de biocombustibles podría también aumentar la demanda de productos agrícolas.
A nivel mundial, los recursos de agua dulce son suficientes, pero están distribuidos de manera desigual. Nuestro país es uno de los favorecidos por tal distribución, razón por lo cual es vital que preveamos mecanismos para poder favorecer el abastecimiento hacia aquellos países que no van a poder contar con ese recurso si queremos evitar un conflicto armado.
Mar del Plata y la pesca
La FAO estima que van a ser vitales los productos pesqueros para poder alimentar de manera saludable a la población mundial, teniendo que aumentar su producción de las 50 millones de toneladas actuales hasta las 600 millones para el año 2050. Todos los organismos internacionales y nacionales son conscientes de que el modelo actual de pesca no es sostenible y a mediano plazo provocaría el agotamiento del recurso. Como evidencia, basta comparar el tamaño de la merluza que consumimos hoy en día con el de hace solo 10 años. En el mundo, el 40% de los productos pesqueros provienen de granjas ictícolas. El empresariado local, acostumbrado a tirar red y sacar, no advierte que sus hijos o nietos no van a tener que pescar. Es hora de que inviertan en nuevas formas de producción como la acuicultura y las granjas ictícolas. No es un planteo ecológico de Greenpeace, es un planteo económico.
Aquellos que son creyentes de la profecía maya de que el mundo finaliza en 2012, tendrán un futuro más prometedor. Sin embargo para aquellos que tenemos un poco mas de optimismo y queremos seguir luchando nos depara un nuevo mundo con grandes desafíos. Nuestro país tiene absolutamente todas las condiciones naturales y humanas para revertir todos los pronósticos que nos alejan de ser una de las potencias del futuro. No nos preguntemos más que puede hacer el país por nosotros, preguntémonos qué podemos hacer nosotros por nuestro país.
(*) Licenciado en Economía (CEMA)
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