TODOS LOS DIAS SE APRENDE ALGO NUEVO...

* Roberto Molina
www.elretratodehoy.com.ar


Es evidente que los argentinos todos los días aprendemos algo nuevo, en este país tan lleno de sorpresas constantes. Resulta que luego de que hemos estado sufriendo durante varios días, recorriendo todos los cajeros automáticos de los distintos bancos de Mar del Plata, con el objetivo de encontrarnos con nuestro dinero -- que no es del banco --, nos enteramos que el faltante de billetes es porque los argentinos gastamos mucho durante las fiestas de Fin de Año. Y las consecuencias de esos gastos desenfrenados, es que los billetes se esfumaron como por arte de magia. ¿Quién los tiene? ¿Habrá que preguntarle al Gran Bonete...? La conclusión de la falta de billetes es que los únicos culpables, somos nosotros, los argentinos. La simpática presidenta del Banco Central de la República Argentina, Mercedes Marcó del Pont, fue la encargada de lanzar esa descabellada afirmación.
Y por culpa de nosotros, los argentinos, que hemos gastado mucho durante las fiestas de Fin de Año, el gobierno tuvo que mandar a imprimir billetes a Brasil, porque en la Argentina, aparentemente, no hay capacidad para hacerlo. ¿Esto también será culpa de los argentinos? La Marcó del Pont efectuó esas afirmaciones con cara risueña y con ello estuvo a punto de convencernos de que no debemos gastar tanto dinero...
También ha faltado nafta y hemos tenido que recorrer estaciones de servicio, muchas de las cuales o no tenían el combustibles o limitaban a diez o veinte litros por cada automóvil. Faltó que saliera el devaluado Anibal Fernández para decir que es culpa de los argentinos, porque los automóviles son utilizados en demasía y ello origina la escasez de combustibles...
También faltó energía eléctrica. ¿Habrá sido porque los argentinos consumimos demasiada electricidad con nuestros aparatos electrónicos y con nuestros aires acondicionados? En este rubro, sólo faltó que saliera Julio De Vido -- quien sufrió en carne propia la falta de energía, cuando concurrió a casarse en un registro civil -- saliera a echar las culpas a los argentinos por no hacer un uso responsable de la energía.
Mientras todo esto nos sucedía a los argentinos, la señora presidenta de la Nación continúa vanagloriándose con lo bien que funciona la economía argentina. Los números que ella maneja indican que la economía de nuestro país nunca anduvo tan bien y seguramente aspira a pasar a la historia como la presidenta que logró el óptimo funcionamiento de la economìa.
Y no tendríamos que sorprendernos, si aparece algún papagayo oficial (léase, vocero gubernamental) que nos diga que por el excelente funcionamiento de la economía, los argentinos tenemos que aceptar que falten billetes en los bancos, que no haya nafta y que no haya electricidad... En el contexto de un gobierno que oculta todo, comenzando con los datos del INDEC, no habría que sorprenderse si llegamos a la conclusión de que este es un mensaje del gobierno nacional, exhortándonos a enfriar la economía...