DOS ENCAPUCHADOS ARMADOS ASALTARON UNA VIVIENDA EN EL BOSQUE PERALTA RAMOS DE MAR DEL PLATA

Dos delincuentes armados y encapuchados ataron y golpearon al hijo del matrimonio. El hecho ocurrió el lunes por la noche en una vivienda ubicada en Don Arturo y Los Chañares. Robaron dinero y objetos de electrónica, y escaparon. Vecinos piden mayor presencia policial
Una familia fue asaltada en el Bosque Peralta Ramos por dos delincuentes armados y encapuchados. Las víctimas fueron reducidas y maniatadas. Amenazaron y golpearon al hijo de la pareja, y tras obtener su botín se dieron a la fuga. El robo ocurrió el lunes en horas de la noche. Los vecinos denunciaron una ola de robos en la zona y pidieron mayor presencia policial.
Carlos Seoane, un contador de 59 años, regresó a su casa cerca de las 19,30 junto a su mujer, su hijo y una pareja de amigos que había venido de Chile a visitarlos. Cuarenta y cinco minutos después, la tranquilidad de la reunión familiar se vio interrumpida cuando dos delincuentes, de entre 20 y 22 años, irrumpieron en el hogar tras cortar el alambre perimetral y acceder al parque a través de un pequeño agujero.
El hijo de Carlos, de 21 años, estaba en un jardín de invierno cuando los asaltantes lo abordaron y tras amenazarlo a punta de pistola lo llevaron hasta el living comedor de la propiedad donde se encontraban sus padres y sus amigos.
Carlos indicó a El Atlántico que los ladrones cortaron los cables del teléfono, los cuales fueron propicios para atarlos. Luego comenzaron a exigirles dinero.
El contador quedó tendido en el piso boca bajo junto a un amigo en living, las dos mujeres en el comedor y el hijo, en un pasillo que conecta con la cocina.
Según narraron las víctimas, los delincuentes pedían dinero. Ante esa intimidación, uno de ellos apuntó en la sien al joven y le pegó varias patadas. Tras revolver varias habitaciones de la planta baja y alta, obtuvieron billetes en pesos y en dólares. Además, se llevaron una notebook, una cámara de fotos, una consola de juegos y un GPS. Tras permanecer unos treinta minutos en la casa, escaparon por el mismo lugar por el que habían entrado.
Algo que a la familia resultó llamativa fue que la Policía Científica no encontró huellas en la casa, porque lo que dedujeron que los asaltantes actuaron con guantes.
La casa de los Seoane se encuentra por la calle principal y solo a diez cuadras de la entrada principal de acceso al barrio. La vivienda posee alarma, rejas y un alambrado. Sin embargo, las medidas de seguridad no fueron suficientes y pudieron ser vulneradas por los delincuentes.
Ante esta situación, los vecinos denunciaron haber sido víctimas de varios asaltos en los últimos meses. Un día después de ocurrido el asalto a la familia Seoane, los vecinos se reunieron en la Sociedad de Fomento con autoridades policiales de comisaría quinta e integrantes del foro de seguridad.
Según expresaron los habitantes del bosque, los robos se producen a toda hora, cuando las casas están vacías pero también cuando hay personas. Ante la ola de robos solicitaron mayor presencia policial y vigilancia en la zona. “Desde que terminó el operativo de seguridad de verano, sacaron al patrullero que estaba en el ingreso al barrio y desde ahí no paran de robarnos”, expresó una vecina.

Fuente Diario El Atlantico de Mar del Plata