ESTIBADORES DE FIESTA Y UNA RESERVA NO TAN NATURAL

por Gerardo Gómez Muñoz
para el Diario La Capital MDP

Durante mucho tiempo las cooperativas de pescadores fueron el blanco de todas las críticas debido al "negreo" de los trabajadores y otros abusos. Pero hace rato que los medios no hablan de esas irregularidades, algo ha pasado. Los integrantes del SUPA, el sindicato que nuclea a los estibadores y los propios titulares de las cooperativas, tienen explicaciones que facilitan el entendimiento. Alrededor de una mesa el secretario general del gremio Juan Ferreira, los titulares de diversas cooperativas, Carlos Sepúlveda, Omar Alonso, Alberto Rosa y el presidente de la Cámara de Estibaje y de la Federación de Cooperativas, Santiago Pratto, celebrando la reelección de Ferreyra y del adjunto Angel Ochoa se ufanan de los acuerdos logrados y del promisorio presente.
"Después de 25 años de desencuentros y enfrentamientos, maduramos el SUPA y los cooperativistas y entendimos que si todos somos trabajadores debíamos unirnos. Así es que hoy todos los cooperativistas-trabajadores estamos afiliados al sindicato". Los beneficios fueron llegando en cadena desde ese momento cercano. No olvidan destacar la intervención del ministro de Trabajo de la Nación Carlos Tomada en los acuerdos alcanzados. Más del 90 por ciento de los que trabajan en las cooperativas están regularizados con lo que el "salario en negro" ha pasado a ser una ínfima minoría que es legado de la crisis del 2000 que obligó a empresarios y trabajadores a guarecerse bajo la forma de las "cooperativas truchas", dolosa deformación que amenazaba con hacerse carne en diversos sectores portuarios.

Producción y salarios

El nuevo status llevó a una rápida conquista: las paritarias. De inmediato los salarios se incrementaron y respondieron al nivel de excelencia adquirido por la estiba del puerto local. Este es el de más rápida gestión entre todas las estaciones marítimas argentinas. Esto es que en el puerto de Mar del Plata tanto la descarga como la carga se hacen más rápidamente que en cualquier otro. Ello abarata los costos y a la vez cotiza el trabajo de los operarios. Muchos de los que antes llegaban en bicicleta o en colectivo, para cumplir con la siempre pesada e insalubre tarea, hoy lo hagan en flamantes automóviles. Pero no por las conquistas logradas habrá de mejorar el costo en el desgaste que la ruda labor le devenga al físico. Apenas el alivio, ante las adversidades y lesiones, proporcionado por una obra social que recién iniciada marcha hacia más conquistas. Pero en este escenario se yergue, como uno de los principales hitos alcanzados recientemente y por la firmeza con que el ministro Tomada se involucró: la jubilación a los 52 años de edad. Hacía 25 años que los pioneros del SUPA luchaban por este reclamo que responde al desgaste físico que cobra este tipo de trabajo como el de las insalubridad que encierra la tarea en las bodegas de los barcos y otros inconvenientes similares. La integración de las cooperativas a la conformación legal enmarcada en el sindicato ha llevado a que hoy éste nuclee a unos 700 estibadores de los cuales más de la mitad provienen de las cooperativas que antes "negreaban".

Reserva ¿no tan natural?

Caminar por el puerto, una verdadera comunidad de vida propia y distinta, es para el periodista una fuente inagotable de novedades. La repercusión mediática del incidente entre los presuntos barras bravas de Aldosivi y los ecologistas autoconvocados, descubrió otras aristas de la noticia que parecía tan lineal. Resulta que ya en 1978 se había determinado que el puerto sólo podría expandir su actividad -esencialmente la industrial- hacia el sur. Es decir que la magnanimidad de los "donantes" de la franja de tierra a la Reserva Natural, afectaba muy gravemente a una zona con claro destino de explotación y seguridad definidos. Hay más cuestiones que hacen imposible resumir en esta columna los diversos pasos que conducen al conflicto. Sólo mencionar que en 2001 ante un proyecto de ley para crear una reserva natural a expensas de las tierras del área puerto mereció el rechazo de todo tipo de entidades e instituciones, el que fue elevado a la Legislatura bonaerense. La Shell y Gas del Estado habían dado a conocer sendos estudios haciendo saber que las tierras hoy ocupadas por la "Reserva Natural" no estaban inundadas y eran "terrenos aptos para su uso industrial". Los informes no concluyen ahí y siguen apuntando que "la laguna que constituye el punto central del pretendido humedal allí localizado es de carácter artificial y no natural". Esto último ha sido informado "por los estudios realizados a requerimiento de la Administración Portuaria Bonaerense". Estos abundan en detalles sobre la contaminación de las aguas allí existentes". Los entendidos en el contenido de "las dos caras de esta moneda", abundan en datos, cifras, gestiones, intercambios de notas, difíciles de resumir, pero dignos de ser abordados con largueza en próximas oportunidades. No obstante se puede concluir, por ahora, subrayando que el Consorcio Portuario Regional de Mar del Plata por las atribuciones que se le concedieron hizo saber que "no está en condiciones de desafectar parte de las superficies cedidas (al Consorcio) sin grave menoscabo para el sistema y para el futuro del Puerto de Mar del Plata". También reitera que "estas tierras conforman la singular y principal reserva disponible para su expansión". Lo más insólito de este desaguisado creado por administraciones oficiales y su desconocimiento de los derechos y deberes propios y ajenos, será determinado cuando se conozca de dónde salen esas aguas que no son naturales. Estas últimas apelaciones del Consorcio datan de 2006.

Artime habló claro

De la mejor manera para cortar lenguas malintencionadas actuó Marcelo Artime en el debut como secretario de Gobierno. Al día siguiente de su asunción se presentó en la Dirección de Inspección General, acompañado de su subsecretario Martín Aiello y del director de la repartición Eduardo Bruzzeta. Artime lo ratificó en el cargo funcionario, destacó su gestión y exhortó a todos, incluidos los jefes, a colaborar en la tarea que desempeñan. Este simple episodio normal en cualquier administración, tiene una especial significación. Caciques llegados o ascendidos en el malón que encabezó el "Ruso" Katz, según testimonios coincidentes "verdugueaban" a los que se niegan a "integrar brigadas especiales" con la amenaza "ya van a ver cuando lo limpien a Bruzzeta y a Alveolite, que va a ser lo primero que resuelva Artime". La mejor forma de limpiar de intrigas, corrillos desestabilizantes y persecutorios, fue la escogida por el secretario Artime. En todos quedó la sensación de que la "brigada Rusa" por ahora va a disimular su resentimiento. Más aún cuando al correr de los días adviertan que el otrora padrino de Graciani y de Gómez ya no corta ni pincha.

Atención Suso

El ex senador Jesús Porrúa está armando sigilosamente su juego para las próximas contingencias electorales, sean internas o de "consenso". No olvida a los que le jugaron feo en su última movida para la reelección en el senado provincial. Por las dudas hay que comentarle que mientras él vacacionaba, a Oscar Pagni se lo vio, por lo menos dos veces, cafeteando con el "referente local, seccional, nacional e internacional de Cleto Cobos" que dice que "viene para recuperar todo", como si no se enterara que volvió a ganar Gustavo Pulti, doblando al segundo. Otros radicales anduvieron también de sociales, tal el Morena. Vino Ricardo Alfonsín escoltado por Tato Serebrinsky y Mario Rodríguez para hablar del futuro inmediato y brindar por el nuevo año. Se vio también a la diputada Liliana Denot (Chascomús), al senador Carlos Fernández (Tandil), Mario Raiteri (General Alvarado) y varios más de diversas localidades. En tanto en Estación Chapadmalal su ex delegado municipal José Abel Cristóbal reunió el domingo en gran asado, unos 300 asistentes. Fue la sesión final de la tradicional "Peña de Cristóbal". Dirigentes radicales, amigos de diversos partidos políticos, representantes de clubes, asociaciones de fomento y de diversas agrupaciones testimoniaron el poder de convocatoria del referente radical. De Mar del Plata se vio a Emiliano Giri, donante de la vaquillona, al concejal Maximiliano Abad, a Pablo Sirochinsky y referentes barriales.