EL ESPEJO ROTO QUE YA NO DEVUELVE LAS IMAGENES DE ANTES

Análisis político // por Gerardo Gómez Muñoz 

para el Diario La Capital de Mar del Plata

Ser o no ser, esa es la cuestión. Ninguna originalidad si nos remitimos a los quinientos años de vigencia que lleva el aserto shakespeariano. Sin embargo pareciera que en estos días del siglo XXI marplatense, en el Concejo Deliberante, no es tanto la cuestión del ser en sí, sino la del parecer, la que desvela a algunos actores de desafortunado tranco. Por cierto que ese ya es otro tema, porque el parecer no remite a ninguna esencia, sino a las puras apariencias de la cosa. En ese terreno, en el del parecer, entran en juego la candidez o ingenuidad del público, según su proclividad a creer los artificios y, también, la versatilidad moral de quien siente (o no) culpa o vergüenza por las brechas existentes entre lo que se quiere aparentar y la pura realidad. Lo que no hay en ese juego es verdad, ni interés por cuidarla.

Cuando Tony Constantino se sentó junto a Vilma Baragiola y Emiliano Mensor frente a la secretaria general del gremio de Camioneros Eva Moyano, y le pidió aportes para la campaña del año que viene a cambio de votar un expediente, no estaban, ninguno de ellos, preocupados por el parecer. Se remitían a su ser de personas pidiendo apoyo a cambio de un favor. No les preocupaba si eso parecía un pedido de coima, o si era impresentable que lo hicieran desde los cargos que ocupan.

En el video, largamente difundido por estas horas, se los ve concretos, puntuales y decididos. El tono entre chabacano y grotesco de la conversación permite pensar que hasta se sentían bien en la situación. Como con cierta comodidad, gozando algo de una posición de poder y de las oportunidades que suelen acompañarlo. Una vez difundido el video vino sí la preocupación por el parecer. Parecer desprevenidos frente a una celada ("cama" dice Baragiola) preparada por oscuras fuerzas del mal, parecer ingenuos, parecer indignados, parecer víctimas.

El problema es que todo aquel que ve ese video, los ha visto siendo como son cuando no están preocupados por lo que parecen. El lenguaje siempre correcto al referirse a los periodistas y la prensa, se transforma en el video, en boca de Baragiola, en un desdeñoso "después que se aburren y se van (los periodistas de las comisiones) yo saco los expedientes difíciles", la pulcritud republicana de la que siempre se ufana el radicalismo en un "lo único que les vamos a cobrar (por sacar el expediente que quería Camioneros) es una ayuda para la próxima campaña, porque las campañas son caras", y demás cosas por el estilo.

Nada queda en ese video del discurso correcto de las apariencias. Es todo desnudez. Desnudez de pruritos, de transparencia, de seriedad. Ni qué hablar del compromiso con los bienes patrimoniales: están dispuestos a tirar un chalet no porque les parezca conveniente para la ciudad, por la razón que fuere, sino a cambio de una "ayuda" para la campaña, que es "cara", y para la que falta más de un año y medio, se podría agregar. Extremadamente grotesco es que integre la comitiva del "pro destruir el chalet", el pomposo asesor Mensor que inició y comandó puebladas para que muchas familias de trabajadores clase media no pudieran tener dignas viviendas a los precios asequibles del Procrear. Ahí en contra del gobierno alzaba la bandera del medio ambiente. Ante Eva Moyano portaba la piqueta de la destrucción del chalet y pedía un camión para llevar los escombros.

Pero no todo es malo. La presencia desnuda del ser permite juzgar mejor. Los que no son lo que parecen necesitan distracción, desinformación e ingenuidad. En ese sentido podría decirse que este es un momento bastante esclarecedor.

El espejo roto

Se podrán tapar murales, se dirán rimbombantes discursos partidarios, se negarán episodios que la tecnología actual testimonia con crueldad, se presionará a la Justicia para que lo que es, solo parezca...pero no se logrará que el espejo roto por más artificios que se usen reponga la lozanía de las imágenes que antes lucían en plenitud. El costo será inevitable porque al primer intento de ubicar el malhadado suceso, quizás con exactitud y a lo mejor así lo subrayen la Justicia y la Historia, en el plano de la "corrupción estructural", que "así lo hacen todos", o "siempre se hizo así", fue dinamitado. Claro, hubo quienes como los concejales Nicolás Maiorano y Mario Rodríguez y el titular del propio comité de la UCR Daniel Núñez quisieron llevar a la Justicia a la víctima de lo que podría llegar a ser un intento de cohecho. Flaco favor le hicieron estos petardistas que atacaron inminentes acuerdos e hicieron estallar el espejo y con ello la imagen que se debía preservar. La torpeza con que actuaron no habilita conmiseraciones disculpantes. A partir de ese momento se desató el aquelarre. El video de marras en 24 horas dejó de ser la figurita difícil para pasar a constituirse en el chiche apetecido y no muy difícil de conseguir. La tecnología ya lo multiplicó en centenares o miles. El resto del Concejo espera desde el viernes que el bloque o la UCR en pleno resuelva el verdadero drama interno. Ni las encendidas proclamas ni la victimización alcanzan para tapar el escándalo que logró el milagro o el ascenso a la racionalidad de los ediles opositores que quieren, unánimemente, acelerar los tiempos del remedio institucional. Deben entender todos, en especial los que se perdieron en la desmesura de su propio desenfado que ahora hay que salvar la pisoteada dignidad de las instituciones. Es lo que espera la azorada comunidad marplatense. Tal vez, los próximos meses lo dirán, se llegue inclusive a recuperar el afecto y la credibilidad ganada por quien hoy es la mayor perjudicada, en su carrera política. La vida pública conoce de episodios donde el electorado renovó el afecto malgastado por sus figuras queridas.

El pescado huele mal

Pocos vuelven desde donde volvió Pedro Fernández, el secretario general de la CGT y adjunto de la UTA. Se le atrevió a su secretario general Daniel Medina en una elección de delegado encarada como una pelea por el título y perdió y de la peor manera...por cinco votos. Como gato entre la leña peleó por su permanencia en el cargo sindical y la ganó. A partir de entonces optó su dedicación plena en la conducción cegetista y su quehacer se nota, pese a que las intenciones políticas de Hugo Barrionuevo y de Hugo Moyano aspiraban a este bastión que hasta ahora había sido un raro ejemplo de unidad. Se solidificó con sus compañeros de conducción y siguió al frente de la pelea de los gremios adheridos. Con ellos se lo encuentra siempre al frente de la mayoría de los conflictos, especialmente en los referidos al puerto y a la pesca. Una vez más los acompañó a esos sectores en una audiencia en el ministerio de Trabajo, pero esta vez no requirió la compañía de los empresarios. La jugada de estos ya está "junada". En cada una de ellas hacían como que acompañaba las quejas de los trabajadores, pero sus lamentaciones eran siempre las más escuchadas. Con bronca Fernández y sus compañeros mascullan "los empresarios siempre volvieron con alguna medida a su favor, créditos, facilidades o lo que sea pero nunca se acordaron de acceder a alguna mejora consecuente para los trabajadores". Y los números asisten al reclamo de la clase obrera, pues los últimos datos estadísticos certifican que la captura de pescados ha aumentado en alrededor del 5 por ciento y la recaudación en más del 24 por ciento. Entre tanto el trabajo sigue decayendo y las compensaciones salariales no llegan. Muy sencillo, según las denuncias los empresarios no llegan con la pesca a Mar del Plata y faenan en alta mar. Precisamente ayer al cierre de esta página la CGT se reunía en plenario para considerar estos abusos y conflictos en otros gremios...El tiempo "de la pavota", parece llegar a su fin...

Hablando del puerto, Tettamanti

Enfrascado en sus peleas con los puertos uruguayos que se aprovechaban de la inacción argentina en el debido control de los puertos nacionales a través de los cuales se deberían reembarcar a ultramar las exportaciones que utilizan nuestras vías fluviales, con una caída de ingresos, unos 70 millones dólares, para el erario nacional, parecía que el ingeniero Horacio Tettamanti había dejado la política local....Minga, aparecieron en diversos lugares de la ciudad pasacalles con la elocuente advertencia "Tettamanti-2015". Hace unos meses en rueda de amigos y de otros no tanto había lanzado un terminante "yo no me bajo de ninguna candidatura". Algunos tomaron la cuestión como una simple bravata del brioso subsecretario de Puertos y Vías Navegables. Ya es evidente que se trató de un anticipo. De entrada habrá que marcarle la cancha o los canales..."si no concluyen los trabajos de dragado, más vale ni se le ocurra"...Hace dos meses se hablaba de "un mes", ahora ya se dice sin pasión "a fines de setiembre"