*Jose Luis Ponsico
Al menos por un par de días, 24 y 25 de mayo, millones de personas, mucha juventud, exhibieron una Argentina "integrada y optimista", según la consideración de todo el arco político, la mayor parte de la prensa, sin olvidar a los sociólogos, psicólogos y pueblo en general. Un acierto.
Por distintas razones, desde el espectáculo gigantesco en la Avenida 9 de Julio, el histórico epicentro del Obelisco, monumento "in fine" de la ciudad de Buenos Aires, virtual sede de los grandes acontecimientos, vivió varias jornadas inolvidables. Los memoriosos recordaron "el cierre" de Raúl Alfonsín, octubre del´93.
Los pibes revivieron el sentimiento patriótico con las presentaciones de los ídolos musicales, donde convivieron todas las expresiones populares. Desde el folclore más calificado con el chaqueño Sixto Palavecino, la vigente Teresa Parodi y la mujer-niña Soledad Pastorutti, con rock de "Fito" Páez, los "Auténticos De-cadentes" y "Las Pelotas"
Desde el fondo de la gran historia del tango, el notable maestro (octogenario) Horacio Salgán, que hacía 9 años que no actuaba -problablemente nunca lo haya hecho para millones al cabo de seis décadas de actuación- y otra vigente, con un paso por la Política, Susana Rinaldi.
El desafío del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner es aún mayor. Los que analizan conductas populares sostiene que el 2011 puede ser un año de muchas mani-festaciones masivas, no solamente remitidas a actos políticos. Se intuye una Argentina con mayor capacidad de movilización.
El impulso tomado por el oficialismo después de la derrota en elecciones legislativas de junio 2009 sigue sorprendiendo a "propios y ajenos". La oposición no articula un Plan -la frase que acuñó el siempre candidato Francisco De Narváez, hace un año: "Yo tengo un Plan", decía- que haga pensar en una alternativa con sentido estratégico.
Mauricio Macri vivió la reapertura del Teatro Colón con el "glamour" de otra jornada histórica, aunque el público del lujoso esce-nario pertenece a una clase social "media y alta" -más de lo segundo que de lo primero- pero sigue teniendo problemas con un error generado hace un tiempo: las escuchas de "sus contratados" en un tema familiar.
El sociólogo Horacio González, director de la Biblioteca Nacional y uno de los intelectuales cercanos al gobierno, reprodujo lo que muchos pensaron: "El Bicentenario tiene que servir para reconstruir la noción de los argentino", dijo. Hizo una lectura del pasado reciente y no tanto, planteando los desafíos para que no quede un festejo vacío.
González, en su repaso, aludió a otras celebraciones de la Patria signadas con Estado de Sitio y el movimiento sindical proscripto. Aludió a la "irrupción del peronismo en los´40 como mestizaje de la cultura criolla", dice. O de "la cultura inmigratoria" en tiempos de Hipólito Yrigoyen.
Ahora, resulta que el ex Presidente de la Nación, Néstor Kirchner, está posicionado como virtual candidato a la Presidencia para el año que viene. Distintas encuestas de opinión, propias y no tanto, lo ubican con un piso de 30 por ciento de adhesiones. Los otros precandidatos, Macri y Julio Cobos, no superan el piso de 11% en cada caso.
El vicepresidente de la Nación estuvo en la reapertura de Colón, al lado de Mauricio. No obstante, el mendocino Cobos luciendo la representación del gobierno nacional en el epicentro de la cultura metropolitana, aparecía como si estuviera en "offside" en medio de un telebin nocturno.
Lo de Macri es algo más complicado.El origen de su procesa-miento tuvo que ver con una disputa, rencorosa, entre su padre -el legendario Franco- y su cuñado. La cuestión judicial se agrandó tanto que Mauricio bajó mucho en las encuestas de opinión. En marzo de este año las inundaciones lo habían "golpeado" en su imagen como gobernante.
Entretanto, Ricardo Alfonsín se lanzó al ruedo en Ferro. Pro-yectando la imagen cercana, no sólo en lo físico, a su padre (Raúl) en la antesala del 30 de octubre del´83, el hijo del ex Presidente de la Nación convocó al radicalismo en su conjunto "a ganarle al kirchnerismo en el 2011".
Alfonsín, hijo, no la tiene sencilla. Deberá enfrentarse con Julio Cobos, sostenido por la antigua dirigencia radical (Leopoldo Moreau, Federico Storani, Raúl Baglini, Marcelo Stubrin) que desde la Coordinadora y en los´80, lucían como los "herederos de Alfonsín" Hoy, el heredero genético es Ricardo.
No mide bien Elisa Carrió que, ahora, mantiene una entrañable relación política con el propio Ricardo Alfonsín. En el programa de Mirta Legrand no desestimaron una fórmula entre ambos. Hubo un principio de acuerdo entre la UCR. partidaria (Alfonsín) y la Coalición Cívica.
Entre ambos, según mediciones previas, alcanzarían alrededor de 15% en las mediciones actuales. Así, estarían por encima de Mauricio Macri, Fernando Solanas, Carlos Reutemann, Eduardo Duhalde y Felipe Solá, entre otros. Sorprendió el periodista Mariano Grondona, alguien que
fue un virtual "arquitecto" de la Alianza.
En la última presentación de "Pino" Solanas al ciclo de "Hora Clave" que conduce el analista y académico, Grondona, ex coequiper de Bernardo Neustadt, dijo: "Sepa que hoy me siento políticamente muy cerca de sus posiciones". Solanas lleva cuatro décadas en la vereda de enfrente de Mariano. Fue sorprendido.
Otros hombres del "universo mediático" opinan que así como el kirchnerismo perdió capacidad en el juego parlamentario y tiene una lucha encarnizada con los monopolios de la Prensa, desde el gobierno ha galvanizado el poder territorial y partidario. Enrique Zuleta Puceiro, que alguna vez aconsejó a Graciela Fernández Meijide, fue más lejos.
"Los Kirchner -escribió Zuleta Puceiro- han demostrado tener una capacidad de decisión política fuera de lo común", se lee. "La gran fuerza que exhibe, hoy, el gobierno, es que la gente los vé gobernando todos los días", agregó. También describe algo que se adelantó aquí:
"Kirchner tiene el 30% en todas las mediciones, el resto suma un 60% entre siete u ocho precandidatos; con la salvedad de un 12% y hasta 15% de indecisos", sostiene. "En todos los casos, la oposición sólo puede hoy apuntar a un "ballotage" o segunda vuelta", concluye.
Entretanto, Daniel Scioli estaría revisando todo lo anterior en materia de Seguridad en el tumultuoso conurbano bonaerense. La "enmienda Stornelli" fue una frustración para el mandatario. Aunque no difiere, en el análisis, de otras experiencias si se piensa en León Arslanián y antes Raúl Rivara, funcionario de Felipe Solá.
Si se trata de reconstruir el pasado dejando de lado a "los ídolos de hoy" (Mirtha, Susana, Tinelli, el millonario chocolatinero, entre los que pululan en la televisión vernácula) hasta el legendario French, empleado de correo, que podría ser reivindicado como "el primer gran militante" de la causa patriótica.
"Con Berutti sabían muy bien los 400 o algunos más de los vecinos a los que les repartieron escapelas y pidieron amablemente que no dejaran de ir al Cabildo el 25 de Mayo 1810", como no siempre se enseña. En la exageración acostumbrada no faltó alguien, ahora, que dijera French y Berutti "eran peronistas".
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