"QUIZAS ESTEMOS UNA SEMANA SIN LEER CLARIN" DIJO UNO DE LOS DELEGADOS DESPEDIDOS

Los delegados de Artes Gráficas Rioplatenses, donde se imprime el matutino de Ernestina Herrera de Noble y La Nación, fueron amenazados por el gerente de circulación de la planta impresora. Estudian más medidas de fuerza.
Los delegados de los talleres Artes Gráficas Rioplatenses (AGR), donde se imprimen los diarios Clarín y La Nación, no descartan incrementar las medidas de fuerza si los directivos del grupo empresario no reconocen su condición gremial y los reincorporan a sus tareas. Ayer a la madrugada levantaron el acampe que realizaban frente a la planta impresora “para que la empresa no se victimice”, pero en los próximos días aseguraron que lograrán que no salgan esos diarios.
“Quizás estemos una semana sin leer Clarín”, vaticinó Luis Siri a Tiempo Argentino, uno de los delegados despedidos.
Los delegados fueron recibidos el viernes a la medianoche por Juan Salvat, el gerente de circulación, quien lleva 28 años trabajando en el diario, con quien sólo pudieron conversar unos minutos en el hall. “Lo único que hizo fue amenazarnos”, contó Siri. “Alcanzamos a dejarle en el escritorio un documento con los reclamos y les pedimos que se acercaran los directivos del diario, no de la planta, que son los que toman las decisiones.”
Los delegados relataron que a las cuatro de la mañana del sábado decidieron retirarse “para evitar la victimización con la libertad de expresión o la libre circulación que siempre invocan”.
De hecho, tras la protesta del viernes, las cámaras empresarias como la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) y la Asociación Empresaria Argentina (AEA) salieron a comunicar su condena a la protesta de los trabajadores gráficos. Mientras que ADEPA calificó como un “grave atentado a la libertad de prensa”, AEA dijo que “tales acciones transgreden el ordenamiento institucional de nuestra República”.
Los diez trabajadores despedidos en 2004 y en diciembre pasado se instalaron el viernes a la noche hasta las 4 de la mañana frente al portón de la planta impresora del diario Clarín, ubicada en Corrales al 1300, junto con sus familias y compañeros. Con los cinco nuevos despidos, la empresa dejó a los trabajadores de AGR sin comisión interna.
“Hace seis años que estamos luchando por la libertad gremial que la empresa nos niega”, se quejó Nicolás Rivero, despedido el 20 de diciembre pasado junto a otros cuatro integrantes de la comisión interna de AGR, donde trabajan unos 550 empleados.
Por su parte, Siri pidió “que el Ministerio de Trabajo tome cartas en el asunto. Si no el diario estará sin salir una semana. Tenemos la decisión tomada de llevar el conflicto al diario, donde se toman las decisiones, y no en la planta”. “Esta vez el diario llegó tarde, llegaron menos ejemplares y a algunos lugares ni llegó. La próxima quizás estemos sin leer Clarín durante una semana.”
Por lo pronto, el lunes los delegados volverán a reunirse con sus compañeros para definir los pasos a seguir. “La CGT y la Juventud Sindical nos está ayudando mucho. Y ahora vamos por más. La próxima el diario no sale. Ya se lo avisamos al gerente”, aseguraron los trabajadores.