Se trata de Daniel Alberto Oliva, de 50 años, quien fue hallado muerto de 9 puñaladas este jueves en su vivienda de calle 13 entre 12 y 14 del barrio Playa Serena. El homicida intentó deshacerse del cuerpo que presentaba quemaduras. Hubo un detenido
En un confuso episodio, un hombre de 50 años fue hallado muerto de 9 puñaladas en su vivienda del barrio Playa Serena. El hallazgo se produjo este jueves en horas de la mañana y la víctima tenía la hoja de un cuchillo clavada en el cráneo. El asesino intentó disimular el hecho quemando el cuerpo al incendiar el inmueble. En las últimas horas un sujeto quedó detenido.
La víctima fatal fue identificada como Daniel Alberto Oliva, quien vivía solo en una vivienda precaria ubicada en calle 13 Nº 540, entre 12 y 14.
Fuentes policiales indicaron que la víctima cobraba -desde hacía pocos meses- una jubilación por incapacidad. Aparentemente el fallecido sufría de esquizofrenia.
Además de las cuchilladas propinadas en la cabeza, Oliva presentaba heridas cortantes en los brazos. Estos signos evidencian que el hombre intentó defenderse de los asesinos.
Los pesquisas determinaron que el arma blanca para ultimar a Oliva fue un chucillo de caza con una hoja de filo de más de 10 centímetros.
Desde la Fiscalía establecieron que la muerte se produjo cerca de las 9 de la mañana y el hallazgo fue alrededor de las 11.
Fuentes policiales indicaron que los vecinos notaron que salía una gran cantidad de humo de la casa de Oliva y llamaron a la policía de Playa Serena. Cuando personal policial arribó al lugar encontró al cadáver en una de las habitaciones del inmueble y dio aviso a los Bomberos.
En un principio, personal policial médico constató que la víctima tenía un metal incrustado en el cráneo. Luego se determinó que se trataba de la hoja de un arma blanca.
El incendio se produjo en la habitación en la cual fue hallado el cuerpo cerca de la cama. Al lado del cadáver se encontró una estufa eléctrica de cuarzo que provocó el foco ígneo. Con este indicio, los investigadores presumieron que el homicida intentó disimular el hecho calcinando el cuerpo.
El muerto presentaba quemaduras en la totalidad del cuerpo, principalmente en la zona de la espalda y la cadera. Las prendas de vestir estaban totalmente chamuscadas. Además, en la habitación había ropa y basura desparramadas sobre la estufa y en cercanías al cadáver.
Para últimas horas de este jueves, un sujeto de nacionalidad paraguaya, de 41, fue detenido acusado de ser quien ultimó a Oliva. El aprehendido conviviría con la víctima y habría sido visto por los vecinos en horas de la mañana en las inmediaciones de la vivienda donde ocurrió el crimen.
Los investigadores confirmaron que no hubo violencia en el ingreso del asesino porque las aberturas de la casa no fueron forzadas. Cuando llegó la policía comprobó que tanto la puerta del frente y la del fondo se encontraban entreabiertas.
La operación de autopsia realizada este jueves en horas de la tarde en la morgue, determinó que el hombre murió por las múltiples heridas de arma blanca que le aplicaron en la región occipital izquierda. Una de las estocadas mortales quebró el cuchillo quedándole la hoja clavada en el cráneo. La herida cortante tenía unos 11 centímetros de profundidad.
En el hecho actuó personal de comisaría decimotercera, y del cuartel de Bomberos. En la investigación interviene el doctor Paulo Cubas, a cargo de la Fiscalía Nº 6, que dispuso actuaciones por “homicidio”.
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