Por Gabriel Coronello Aldao
para el Diario La Capital de Mar del Plata
¿Existe una relación entre la cantidad de policías y una mayor seguridad? La evidencia internacional demuestra que esto no siempre es así. Dos casos extremos lo ilustran. Turquía es un de los países más policializados con 444,9 efectivos por cada 100 mil habitantes y sin embargo, presenta la mayor tasas de homicidios en su región. En el otro extremo Finlandia, el país con menor cantidad de efectivos de Europa (152) tiene la tasa más baja de homicidios de ese continente.
Según un informe de las Naciones Unidas de 2013, en América Latina puede percibirse un fenómeno inverso. El país con mayor cantidad de efectivos es Uruguay con 876 agentes, que a la vez junto a Chile y Argentina, presenta una de las menores tasas de homicidios de la región.
El Salvador, con 343 agentes por cada 100 mil habitantes, tiene menos de la mitad de policías que Uruguay. Pero aparece entre los países más violentos del mundo. En 2009 su tasa de homicidios de ubicó en 71 por cada 100 mil habitantes, siendo una de las más altas de todo el planeta.
¿Cuál es el panorama en la Argentina?. Según la ONU el país tiene 222 agentes por cada 100 mil habitantes, lo que lo ubica entre los menos policializados del subcontinente y cerca de la cifra de 298 sugerida internacionalmente por ese organismo.
Pero entre las ciudades argentinas pueden ser percibidas grandes diferencias. Capital Federal, por ejemplo, aparece como la ciudad con más presencia de uniformados de todo el país, al tener 1 policía por cada 161 porteños, según un informe que incluye a los agentes de la Metropolitana, Prefectura y Gendarmería.
¿Cuál es el panorama en Mar del Plata, donde en poco tiempo más, comenzará a funcionar una Policía Local constituida por 702 nuevos efectivos dedicados a la prevención?. Dilucidar la situación no es sencillo debido a la ausencia de datos oficiales publicados. De todos modos con la información disponible, es posible realizar algunas estimaciones.
Todas ellas conducen a la conclusión de que en la actualidad en Mar del Plata existen alrededor de 1800 efectivos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires en actividad. En una ciudad en la que el número de policías y la población varían bruscamente por motivos estacionales, construir indicadores tampoco es simple.
Pero el ejercicio puede resultar útil a los efectos de elaborar una idea aproximada. La conclusión es que, en relación a su población estable, Mar del Plata y Batán tendrían hoy 1 policía por cada 344 vecinos o, lo que es lo mismo, unos 290 efectivos por cada 100 mil habitantes. Esto sin incluir a los uniformados de las fuerzas federales como Prefectura y la Policía Federal con asiento en la ciudad, cuya cantidad de hombres, en rigor, no alteraría demasiado el resultado del indicador.
Ahora bien: ¿qué es concretamente lo que hacen los Policías de la Provincia y cómo están distribuidos? Según datos a los que tuvo acceso LA CAPITAL, el grueso de los efectivos cumple tareas en la órbita de las Distritales Centro, Norte y Sur, de las cuales dependen las 15 comisarías existentes en Mar del Plata y Batán.
Aproximadamente son 850 los uniformados que se dedican a estas tareas, entre las cuales prevalecen las de tipo administrativo.
Por otro lado el Comando de Prevención Comunitaria (CPC) creado a mediados de este año cuenta con otros 750 uniformados, dedicados a realizar un contínuo patrullaje de las 82 cuadrículas en las que se encuentra dividido el Partido. Este organismo es el que mayor presencia tiene en la calle realizando tareas de prevención y manteniendo el contacto más directo con los vecinos.
En su mayoría, el resto de los efectivos -otros 200, aproximadamente- cumple tareas específicas en los distintos organismos descentralizados como Caballería, que dispone de unos 25 efectivos e Infantería, que cuenta con otros 30, y en otras dependencias como Narcotráfico, Científica, Investigaciones, Policía Vial y Bomberos.
Todo parece indicar que en el transcurso de los próximos meses los recursos humanos policiales en Mar del Plata se acrecentarán de manera significativa.
La semana pasada, de los 10 mil egresados de la escuela de la Provincia, 680 fueron formados en Mar del Plata. Se espera que tras su paso por el Operativo Sol durante este verano todos ellos permanezcan durante todo el año en la ciudad.
En paralelo, y merced a una decisión del gobernador Daniel Scioli, el municipio encaró de lleno la creación de la Policía Local. Según lo previsto, este organismo contará con 702 agentes.
Así las cosas parece que en un futuro la cantidad de policías podría dejar de ser un asunto central de discusión. La evidencia internacional demuestra que para diseñar una política de seguridad, acrecentar el número de policías no es una variable que por sí sola garantice buenos resultados. Mar del Plata, como los principales centros urbanos de América Latina, está realizando un acelerado aprendizaje sobre cómo actuar ante el fenómeno del delito y la violencia.
Existe a esta altura un consenso sobre el fracaso en la implementación de las políticas de mano dura instrumentadas por policías dedicadas al castigo y a la represión. Las mejores lecciones parecen provenir de aquellos lugares en los que las policías incorporaron un enfoque más orientado a la prevención, con efectivos mejor preparados y capaces de recuperar la confianza de la sociedad. Por eso, en este punto, emerge una pregunta cuya respuesta será decisiva: Más policía. ¿Para qué?
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